Juego de tronos en Génova 13
(Archivo)
Felipe González dijo que España empezaba a parecerse a Italia pero sin italianos para manejar la situación. Prafraseándolo, el PP empieza a asemejarse al PSOE pero sin socialistas para gestionar su crisis interna. Veremos cómo acaba lo que empieza con seis candidatos a presidir el PP. Todo se ha precipitado tras la renuncia de Feijoo, quien antes de autodescartarse ha debido de leer muchas encuestas y analizar a fondo que hoy ya no se hereda una presidencia y medio triunfo electoral.
La primera estación será la de los descartes, a priori con cuatro candidatos: Margallo, Casado, Bayo y Hernández, salvo que haya factor sorpresa. Y las posibles incorporaciones a la carrera: Ana Pastor, posiblemente la mejor candidata en todos los registros salvo en el generacional. Y quizás la única capaz de cohesionar a un partido que podría quedar fuertemente dividido tras un duelo Cospedal vs Sáenz de Santamaría. ¿Rajoy no está moviéndose entre bambalinas? Dicho eso, ninguna representa exactamente una renovación del proyecto popular. Aunque es posible que, en esta ocasión, alguna de las que desembarcaron en la Normandía de la crisis en el Gobierno o de Bárcenas en el partido desfile en París.
Después llegará el momento de saber qué propuesta tiene cada una para el PP. ¿habrá reformulaciones ideológicas? ¿qué alma se impondrá? Aunque no nos engañemos, difícilmente ganará quien presente mejores credenciales programáticas. Militantes y compromisarios votarán agarrados a otros motivos más emocionales.
Las seis candidaturas –alguna aún sin materializar- es también un fracaso de la vieja guardia del PP, que ha sido incapaz de pastorear al partido como en otros tiempos a favor de una candidatura única. Esta especie de primarias a las que el PP no ha querido llamar primarias se van a celebrar como si lo fueran y con las consecuencias de todas las primarias. Es un método nuevo para un partido acostumbrado al dedazo, que además le funcionaba razonablemente bien. Aunque como todos los procedimientos escasamente democráticos el PP tenía una revolución pendiente. Y esa semirevolución ha llegado: con un trasunto de primarias y hasta seis candidatos.
Génova, 13. Nada de House of Cards. Puro Juego de tronos. Winter is coming.
