Balones de Oro que nunca jugaron un Mundial
Di Stéfano, Best y Weah están en el olimpo de grandes futbolistas de la historia pero por motivos diferentes no disputaron ni un minuto en una cita mundialista
Alfredo Di Stéfano
Madrid
Se debate desde tiempos inmemoriales si el mejor futbolista de todos los tiempos es Pelé, Maradona o Di Stéfano [dejaremos fuera a Leo Messi por eso de ser coetáneo]. Buena parte de los halagos le vienen a los dos primeros por sus triunfos en los Mundiales. El brasileño participó en cuatro y ganó tres, Suecia ‘58, Chile ‘62 y México ‘70. El ‘10’ de la albiceleste participó también en cuatro, se proclamó campeón en México ‘86 y fue subcampeón en Italia ‘90.
Di Stéfano, Balón de Oro en 1957 y 1959, no disputó ni un minuto tan solo. Ni con Argentina, ni con España, que vistió ambas elásticas. ¿Por qué? Por motivos varios. A Brasil ‘50 Argentina decidió no acudir por problemas con la Confederación Brasileña de Fútbol. A Suiza ‘54 la FIFA no permitió a Di Stéfano acudir por estar en plenos trámites para nacionalizarse español. Para Suecia ‘58, ya con pasaporte español, España no consiguió billete. Y en Chile ‘62, ya con 36 años, una lesión no le permitió estar en la fase de grupos. Y aunque viajó hasta Chile con el grupo, la selección española fue eliminada a las primeras de cambio.
George Best
El díscolo George Best, que entre sus frases más célebres están "he dejado de beber, pero sólo cuando duermo" y "en 1969 dejé las mujeres y el alcohol, fueron los peores veinte minutos de mi vida", ganó el Balón de Oro en 1968, mismo año en el que se hizo con la Copa de Europa con el United.
El irlandés, que jugó once temporadas en el equipo de los ‘red devils’ antes de ir dando tumbos por diferentes ligas hasta llegar a estar en 13 equipos diferentes, no estuvo nunca cerca de jugar un Mundial. Porque Irlanda del Norte no consiguió billete para una cita mundialista hasta España ‘82 cuando Best ya estaba en el ocaso de su carrera y el abuso de alcohol lo había anulado.
George Weah
Weah fue uno de los mejores delanteros de los ‘90. EN 1995 se hizo con el Balón de Oro que le acreditaba como el mejor del momento. Fue el primer no europeo en hacerse con el mayor galardón en fútbol a nivel individual. La explicación a no haber jugado nunca un Mundial es simple. Nació en Liberia, un país que aún hoy no se ha clasificado nunca para una gran cita mundialista y que tan sólo lo ha hecho dos para la Copa de África.
Otros jugadores ilustres sin Mundial
Hay, además, una larga lista de nombres que engrosan la lista de buenos jugadores que jamás han estado en una fase final de un Mundial. Como los los galeses Ryan Giggs, Ian Rush y Gareth Bale [aunque el madridista aún tiene la posibilidad], el holandés Jari Litmanen, el alemán Bernard Schuster. Especialmente destacable es el motivo de éste último. Se negó a acudir a un amistoso con la selección germana por el nacimiento de su tercer hijo y después de aquello ya no volvió a vestir más la camiseta alemana.
Audioguía del Mundial Rusia 2018 Play Fútbol
25:50
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