El exconseller de Interior defiende a Joaquim Forn ante el juez Llarena
Jordi Jané, Neu Munté y Meritxel Ruiz han testificado ante el juez Llarena para reiterar que dejaron el Govern por razones personales y desaveniencias políticas, asegurando que fue Jordi Baiget el que abrió la veda de las dimisiones
Madrid
Jordi Jané, Neus Munté y Meritxell Ruiz han testificado este martes ante el juez Pablo Llarena para reiterar que abandonaron el Govern de Carles Puigdemont meses antes del referéndum ilegal tanto por motivos personales como también por desaveniencias políticas, desmarcándose en todo momento de la organización del 1-O así como de la Declaración Unilateral de Independencia.
Los tres abandonaron sus cargos en julio del año pasado, cuando el procés unilateral encaraba la recta final de cara al primer día de octubre. Jané, en ese momento conseller de Interior, según fuentes del caso ha defendido no sólo que nada tuvo que ver con la organización sino que ha defendido también a su sucesor, a Joaquim Forn: ha asegurado ante el juez que los consejeros de Interior "no diseñan los operativos policiales" y también que le consta que Forn "es una persona respetuosa con las decisiones operativas policiales".
Jané, por tanto, ha defendido a Forn de la acusación más grave que pesa sobre él: la de, supuestamente, ordenar a los Mossos que hicieran la vista gorda durante el 1-O y también de no intervenir durante los altercados violentos del 20 y 21 de septiembre en Barcelona.
Por su parte, el resto se ha limitado a poner encima de la mesa las mismas razones personales que esgrimieron públicamente en julio del año pasado tras abandonar el puesto, asegurando que fue el exconseller de Empresa, Jordi Baiget, el que abrió el camino de las dimisiones un día antes.