La Guardia Civil cita a Villar Mir para una toma de huellas

Madrid

Nueva diligencia policial en el caso Lezo y de nuevo el empresario Juan Miguel Villar Mir es el protagonista. La Guardia Civil le ha citado esta mañana a las 09:00 horas de la mañana en la comandancia de Tres Cantos "para la práctica de una diligencia" según aparece en la providencia que hace dos días realizó el Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional a la que ha tenido acceso la Cadena SER.

Según fuentes de la investigación, se van a practicar diferentes diligencias todas relacionadas con el caso Lezo y una de ellas es una toma de huellas al empresario para corroborar si sus datos dactilares son los mismos que aparecen en un "objeto" que se ha localizado y que podría estar relacionado con el pago de un soborno de la constructora.

Villar Mir aparece como imputado en esta causa, la tercera pieza del expediente, en la que se investiga su participación en un pago de 1,4 millones de euros de su empresa a cuentas y miembros del PP a cambio de la adjudicación de una parte del proyecto del tren de Móstoles a Navalcarnero. La operación se llevó a cabo desde una filial de la constructora en México que a su vez realizó este ingreso en una cuenta de Suiza.

También está imputado por esta "comisión" su yerno Javier López Madrid, el que fuera consejero delegado de Mintra, Jesús Trabada Guijarro y el exconsejero delegado y exmiembro del consejo de administración de OHL, Rafael Martín Nicolás.

La investigación apunta a que el yerno de Villar Mir realizó una transferencia en septiembre del 2007 de 1,4 millones de euros desde una filial mexicana de OHL a una cuenta suiza del banco Anglo Irish Bank, controlada por una sociedad panameña. Los investigadores creen que el objetivo del "soborno" era recompensar al expresidente de la Comunidad de Madrid, a Ignacio González, por la presunta mediación que hizo para que la constructora se llevase las obras del Cercanías.

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Ignacio González ha negado siempre que haya recibido este casi millón y medio de euros y el presunto testaferro que envió ese dinero para el expresidente de Madrid, Adrián de la Joya, declaró ante el juez que se quedó con los fondos para saldar unas deudas que le había dejado el grupo Villar Mir por un proyecto que tenían a medias en Burkina Faso.

Un mes después del pago la constructora OHL se llevó el contrato. En anteriores declaraciones el empresario siempre ha negado haber participado en ninguna de las transacciones que están bajo investigación. Es más siempre ha defendido que aquella adjudicación fue ruinosa para la compañía, un negocio desastroso que obligó a la compañía a provocar una ampliación de capital.