Internacional | Actualidad
Premio Sájarov

"La única solución pacífica y fuerte son una elecciones fiables"

Julio Borges considera que al presidente Maduro ya no le queda más recurso que la represión y el miedo. Antes de recibir el Premio Sajarov del Parlamento Europeo, en representación de la oposición venezolana, el presidente de la Asamblea Nacional responde a las pregunas de la Cadena SER sobre la negociación en marcha con el gobierno, la unidad de la oposición y las posibilidades de cambio en Venezuela

El jefe del Parlamento venezolano, Julio Borges. / Orlando Barría (EFE)

El jefe del Parlamento venezolano, Julio Borges.

Estrasburgo

A pocas horas de recoger el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia, Julio Borges atiende a la Cadena SER en los pasillos del Parlamento europeo, que otorga esta distinción a la oposición venezolana. El presidente de la Asamblea Nacional, a la que el presidente Maduro despojó de sus poderes legislativos en marzo de 2017, considera que este reconocimiento es importante porque ratifica que "el problema venezolano ya no es local, en Venezuela se está librando la lucha más importante por la libertad de lo que va del siglo XXI". El viernes estará de nuevo en Santo Domingo, para participar en una nueva ronda de la negociación con el gobierno que algunos de sus compañeros opositores consideran una parodia.

Usted recoge el premio, en representación de toda la oposición.

En realidad es una distinción para todo el pueblo venezolano, que sufre no sólo por motivos políticos, sino por motivos humanitarios.

¿Es coherente premiar a toda la oposición, cuando siguen existiendo diferencias importantes, por ejemplo, en lo que tiene que ver con la negociación con el gobierno?

De cara al futuro, el reto más importante para la oposición son las elecciones presidenciales, que habrá en pocos meses. Y en eso hay un compromiso total de la oposición: un solo candidato, elegido en primarias, con un programa de gobierno que comprenda todas las visiones y sirva para formar un gobierno de unidad. En cuanto a las negociaciones, lideramos nosotros porque en este momento, con tanto acompañamiento y lealtad de las democracias del mundo, era importante intentar materializar unas elecciones libres en Venezuela.

Pero incluso el exalcalde de Caracas, Antonio Ledezma, que también acudirá a recoger el premio Sájarov, llegó a decir que esa negociación era una parodia y criticó con dureza el papel de Rodríguez Zapatero?

Al final puede haber visiones distintas, pero los partidos que nos sentamos en esa mesa representamos a casi el 97 % del parlamento. Es respetable que haya otra visión; cada vez que damos un paso, yo mismo les llamo para ponerles al tanto. Yo también tengo dudas con el gobierno, que ya ha engañado en otras ocasiones, en este momento tan difícil no toca buscar en esta negociación que se den condiciones distintas en el plano electoral. Imagínese que nosotros no hagamos nada y lleguemos a unas elecciones en los próximos meses sin haber dado la lucha para tratar de mejorar las condiciones. Hubiera sido criminal sentarse a esperar pasivamente. La lucha hay que darla en todos los caminos, que conducen a un mismo fin: el cambio de gobierno. La mesa de negociación es un camino, la lucha en la calle es otro camino, el área internacional es otro, el parlamento otro... lo importante es que todo esté sincronizado a un mismo fin, que es la salida electoral del gobierno.

 ¿Espera algún avance en el encuentro previsto para este viernes?

Lo importante es que hay cosas que no había en otro momento. Por ejemplo, sobre Venezuela hay un diagnóstico nítido en todo el mundo de que no hay democracia, de que es un gobierno dictatorial. Y nunca había habido la presión que hay ahora, y no solo en la región; hablamos de EEUU, Canadá, Europa, el Vaticano.... Las cosas no son iguales a las rondas anteriores, hay elementos nuevos importantes

¿Qué pasa si Maduro cumple su amenaza de no permitir que se presenten a las presidenciales de 2018 formaciones como la suya que llamaron al boicot en las pasadas elecciones municipales?

Creo sinceramente que ese tipo de declaraciones no las hace un presidente fuerte. Las hace un presidente débil, al que sólo le queda la fuerza bruta; y no hay nada más débil que un líder al que sólo le queda la fuerza bruta para tratar de imponerse. Un presidente fuerte es alguien con legitimidad, con relaciones internacionales, con un país productivo... Nada de eso lo tiene Maduro. A Maduro sólo le queda el miedo y la represión. No son declaraciones de alguien que se sienta confiado y con apoyos. Tiene tanto miedo a la manera en que lo ve el mundo, tanto miedo a enfrentarse a una elección presidencial justa, a las negociaciones y a la presión internacional, que lo único que le queda es la fuerza bruta.

¿Queda espacio para la autocrítica en la oposición? ¿Cómo explica el mal resultado en las elecciones a gobernadores del pasado mes de octubre?

Creo que al final hay que ser comprensivo. No somos una oposición normal en un país democrático. Estamos dando una batalla muy dura, pero enfrentamos a un gobierno que cambia las reglas, mete presos o inhabilita a dirigentes cuando le da la gana, que nos obliga a juramentar ante la Constituyente. No es fácil, no hay reglas de juego, no hay instituciones, es la ley de la selva. Tener que lidiar con todo eso, y hacerlo con unidad y coherencia, no es sencillo. Seguro que cometemos errores pero pido un poco de comprensión, que vean la enorme dificultad con la que hacemos política en Venezuela. Nos quitan el pasaporte, nos persigue la policía política, nos tienen intervenida la vida.... Estamos luchando contra una dictadura y eso es una dificultad mayor de la que se pueda imaginar

Hablábamos de la división en la oposición, ¿hay tambien división en el oficialismo?

Yo sí creo que hay cambios relacionados con el tema presidencial. Maduro vino a hacer la suplencia a Chávez, pero ahora se quiere presentar candidato, quiere seguir y perpetuarse. Estoy seguro de que eso ha traído luchas dentro. El asunto contra Rafael Ramírez, que fue presidente de PDVSA, no es por una cuestión de limpieza, no es que el gobierno sea honesto y el otro sea un corrupto; es simplemente que se lo quiere quitar como rival. Lo mismo pasa con Diosdado Cabello, al que han ido apartando del poder. Maduro ha ido eliminando a las figuras que estaban alrededor de Chávez, purgándolas al estilo del régimen soviético porque busca prevalecer a cualquier precio.

¿La única solución válida para Ustedes pasa por nuevas elecciones?

La única solución pacífica, fuerte y legítima es que haya unas elecciones fiables, y que le den a la gente la fuerza que se le supone en una democracia. La democracia no es de Maduro, no es del Partido del Gobierno, es del pueblo y tiene que expresarse.

¿Qué se debe hacer con el dinero del premio Sájarov, 50.000 euros?

Estamos discutiendo. Mi visión es que debería darse a una Institución muy fiable en Venezuela para que cree una cátedra de enseñanza de Derechos Humanos a jóvenes en Venezuela. De es manera, el dinero iría a la causa por la que se otorga y serviría para sembrar a futuro una cultura sobre la libertad y los derechos humanos en Venezuela.

Rafa Panadero

Rafa Panadero

Ha desarrollado casi toda su carrera profesional en la Cadena SER, a la que se incorporó en 2002 tras...

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00