Los pinchazos a González y su hermano revelan los sobornos: "He sacado los correos en los que hay tejemanejes de Mercasa"
Pablo González: "Como ahora depende de mi la informática, he sacao todos los correos en los que hay tejemanejes de Mercasa" (sic)
"Tú vas al Gobierno, como hacíamos en Venezuela, dime con quién hacemos esto y te dice con la constructora 'zutanito' y te vas a la constructora y le dices le vas a cargar un 10% más porque habrá que pagar a tal"
Ignacio González, durante la rueda de prensa posterior a un Consejo de Gobierno en 2009. / Ballesteros (EFE)
Madrid
Los pinchazos telefónicos a los cabecillas de la trama Lezo acreditan el pago sistemático de comisiones desde la empresa estatal Mercasa en África y Latinoamérica a cambio de contratos, tal y como adelantó la Cadena SER. Pagos ilegales a funcionarios y cargos públicos a cambio de los contratos licitados por las correspondientes administraciones de cada país, según los informes de los investigadores.
En una conversación grabada en el despacho de Ignacio González entre ambos hermanos en noviembre de 2016, Pablo González desgrana la operativa del pago de sobornos desde la empresa pública Mercasa y sus planes de desmantelar el consorcio -junto a otros socios de la empresa pública- que opera en el extranjero desde hace 15 años para hacer negocio internacional. Unos planes que pasan por usar siempre una empresa local y que, según sus palabras, ya había recibido el visto bueno del expresidente de Mercasa, Eduardo Ameijide, que dimitió tras las primeras informaciones de esta emisora. El pago de los sobornos se haría a través del correspondiente "socio local" en los países donde mantiene inversiones, según Pablo González, exdirector de Estrategia y Operaciones de Mercasa.
Pablo González le explica a su hermano, en la conversación, cómo operaban en Mercasa en el extranjero.
Pablo González: "Bueno, de todo eso ya lo he convencido (en referencia a Eduardo Ameijide) y le digo: lo que te tienes que cargar es el consorcio y la manera de actuar es que nosotros seamos consultora y puesta en marcha, pero no ejecución de nada porque todo lo que ejecutemos no tenemos ni puta idea. Además, eso lo ejecuta cualquiera... hacer naves industriales... Tú haces el proyecto... Entonces es que el consorcio no pinta nada, el consorcio no pinta una mierda, entonces no te hace falta el consorcio. Es que yo utilizo el consorcio por si hay que pagar comisiones eso lo hacía el consorcio y digo pues ahora es muy sencillo: sustituyes el consorcio por el socio local, que tú vas al Gobierno, como nosotros hacíamos en Venezuela, dime con quién hacemos esto y te dice con la constructora "zutanito" y te vas a la constructora "zutanito" y le dices mira, el precio entendemos que es este, le vas a cargar un 10% más porque habrá que pagar a tal. Y le pagas. Ya está joder. Si es así ¿no? Entonces ya le tengo convencido con eso" (sic)
El objetivo con este nuevo sistema, según apunta la investigación, era el de reducir el número de intermediarios para o bien pagar menos comisiones o controlar directamente el pago de las mismas.
Taveira, el prófugo que cobra "bajo cuerda"
En otra de las conversaciones Pablo González reconoce que la relación con el conseguidor Guillerme Taveira, prófugo de la Justicia, continúa en la actualidad a pesar de la orden de busca y captura dictada por el juez José de la Mata por su presunta implicación en otro caso de corrupción que afecta a otra empresa estatal: Defex, dedicada a la venta de armas.
La Guardia Civil señala en su informe que Pablo González afirma en sus conversaciones con Ignacio González que Mercasa continúa relacionándose con Taveira pese a su imputación judicial, que le siguen haciendo encargos y que a Taveira le pagan "bajo cuerda" por su trabajo de conseguidor en Angola. La Guardia Civil detalla que el exdirectivo de Mercasa admite un pago de sobornos a funcionarios del Tribunal de Cuentas del país africano por un contrato de 100 millones de euros. Pablo González reconoce en esa conversación el pago de comisiones ilegales y -subraya- "si no es Taveira el que se encarga de esos pagos será otro".
Además, Pablo González tiene, según el sumario, documentos que acreditarían las corruptelas en Mercasa.
Así se deduce de la conversación intervenida por los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) entre Pablo González con su hermano Ignacio.
PABLO: Como ahora depende de mí la informática, he escudriñao toda la informática y he sacao todos los correos en los que hay tejemanejes (sic)
IGNACIO: Y, ¿quién te los saca?
PABLO: El director de informática
IGNACIO: Pero, ¿es tuyo?
PABLO. Sí
IGNACIO: Si es de confianza...
PABLO: Y luego me he cogido al ingeniero que tenemos allí y digo, explícame todos estos correos... a mí me obligan a.., este no es nuestro, este de aquel, este es de este, este es del otro, me ha puesto a mí en copia y tal, porque es que encima no tienen cuidao (sic)
9 millones "por no hacer nada"
Hay otra conversación clave entre Pablo González y Luis Hermosilla, también directivo de Mercasa e imputado en la operación Lezo,que se produce el 19 de diciembre de 2016. El contenido de esta conversación apunta a un desvío de más de 9 millones de euros con información sobre las empresas utilizadas para canalizar y desviar esos fondos.
Pablo González habla en estos términos del supuesto dinero desviado:
Pablo González: "Él ya sabe, cosa que yo no sé como consejero, el dinero que se ha pagado a METAB y a SOTER, sabes cuánto dinero se ha pagado entre los dos, nueve millones de euros, por no hacer nada, eso me lo han dicho hoy..."
La Guardia Civil interpreta que esos pagos se habrían realizado desde el consorcio MERCASA generándose una facturación ficticia que habría ascendido a 9 millones de euros. Mercasa habría utilizado dos sociedades para facturar en falso , de manera que el fin último era destinar esos fondos al pago de comisiones ilegales.
