La última entrevista de Carme Chacón
La exministra socialista, fallecida a los 46 años, habló con Caracol Radio el pasado viernes 7 de abril en Miami
Madrid
Este lunes el mundo de la política amanece de luto por la muerte repentina de Carme Chacón. Hace tan sólo tres días, la exministra reflexionaba sobre lo que significó su nombramiento como primera ministra de Defensa de la historia de España en en Radio Caracol: "Era un paso que España tenía que dar, que no había dado y que fue bien aceptado, tanto por la sociedad española como por las Fuerzas Armadas". Parte de la entrevista seguía así:
¿Qué fue lo que más te agradó de ser ministra de Defensa?
Trabajar de forma diaria, cercana y cotidiana con las Fuerzas Armadas de nuestro país. Probablemente le contestaría que eso, conocer a diario un trabajo demasiado desconocido en España... pero quiero poner en valor ese arriesgar su vida diario de más de 130.000 militares por la seguridad, no solo de España sino en el mundo, en las misiones internacionales en las que España lleva ya implicada más de 20 años. Sobre todo, conocer su trabajo y conocerlo de cerca, un auténtico honor para mí y un auténtico honor para los españoles tener las Fuerzas Armadas que tenemos.
¿Cuál fue el momento más crucial que tocó atravesar en ese cargo?
Sin duda, Afganistán. Ha sido la misión más arriesgada, más peligrosa, de los más de 20 años de misiones de paz de nuestras Fuerzas Armadas. Me gustaba tratar de poner en valor lo que desgraciadamente los medios de comunicación no dan de lo que fueron las Fuerzas Armadas de ISAF [Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad], en Afganistán. Abrían pozos de agua, carreteras, escuelas, hospitales… todo eso llevaba el nombre de las Fuerzas Armadas de muchos países y en Qala-i-Naw, en los lugares donde estaban las Fuerzas Armadas españolas y no solo ellas, nuestros hombres y mujeres de uniforme... eso es lo que menos se conoce de ese trabajo, lo que suele salir en los medios son los conflictos o, desgraciadamente, las muertes de nuestros soldados…pero fueron sin ninguna duda los momentos más duros… También hubo buenos y bonitos y, afortunadamente, el ser humano es suficientemente inteligente para quedarse con los buenos, pero entenderá que el fallecimiento de un chico joven que se ha ido fuera de su país, que se ha ido a trabajar y a luchar por la seguridad y la paz de todos, que pierde la vida es muy duro para todos y para mí lo era.
¿Qué siente una mujer trabajando en medio de tantos miles de hombres?
Pues esa cosa que tenemos las mujeres que cada vez que una de nosotras da un paso adelante, lo da el género humano entero. Por lo tanto, empujar e ir dándole golpes de martillo a ese techo de cristal que todavía existe es importante. Yo quiero recordar que en España -pero estos son datos de todo el mundo y no son datos de Carme Chacón, son datos objetivos, este último de Eurostat- estamos los dos aquí sentados, usted a mi lado y yo aquí en este micrófono y, si yo fuera conductora del programa, igual que usted, yo estaría cobrando por hacer exactamente lo mismo hasta un 25% menos de salario. Esa es la realidad de las mujeres en el mundo, hacemos exactamente lo mismo que un hombre pero recibimos hasta un 25% de salario menos. Pero ésta no es la más cruel de las estadísticas, la más cruel es el número completamente insoportable de mujeres que están perdiendo la vida de manos de sus compañeros o excompañeros, maridos o exmaridos... a veces incluso pierden la vida los hijos o las madres pierden la vida delante de los hijos. Eso es una cifra, una lacra, completamente intolerable para un país civilizado y no solamente ocurre en España. Por lo tanto hay mucho por lo que luchar, así que cuando una da un paso hacia adelante piensa que está empujando para que la generación que venga tenga las cosas mucho más fáciles.
