Interior pone en marcha un plan de estado de reinserción en las cárceles ante la radicalización de presos islamistas

Madrid

El ministerio del Interior ha puesto ya en marcha un plan de Estado para la "defensa social de España" ante la radicalización en las cárceles de los presos islamistas y también de los comunes. Hay temor ante la posibilidad de que una gran parte de los reclusos salgan a las calles más radicalizados que cuando ingresaron en prisión. La policía ha constatado ya en informes policiales que muchos presos condenados por pertenencia a grupos terroristas islamistas salen de prisión más radicalizados que cuando se les detuvo.

El plan lo recoge una instrucción de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias firmado el pasado 25 de octubre que se denomina 'Programa Marco de Intervención en radicalización violenta con internos islamistas'. En principio el plan se va a aplicar a más de 200 internos. En esta instrucción a la que ha tenido acceso la Cadena SER, Prisiones reconoce que es necesario "contener o limitar el fenómeno de la radicalización violenta de las prisiones para prevenir la captación para la causa radical islamista en los Centros Penitenciarios".

Se va a contar con la ayuda de "imanes moderados" utilizando el convenio que tiene firmada Instituciones Penitenciarias con la Federación Islámica. "Dada la interiorización fanática de la religión que realizan todos estos internos relacionados con el extremismo islamista, se promoverá una interpretación moderada alejada de perspectivas extremistas evitando, en todo caso, la criminalización de prácticas religiosas perfectamente legítimas". Además como elemento común se "va a facilitar el aprendizaje en español, la integración cultural y la mejora del nivel educativo".

La nueva instrucción a la que ha tenido acceso la Cadena SER va dirigida a todos los condenados por pertenencia a grupos terroristas islamistas, a los condenados por captación y adoctrinamiento de yihadistas y a otros reclusos que aunque no hayan sido condenados por terrorismo o captación manifiestan actitudes en la cárcel de desprecio a otros internos no musulmanes. Cada grupo tiene su programa concreto de reinserción y su tratamiento "rehabilitador".

Para los internos FÍES del grupo A, condenados por pertenencia o colaboración con grupos terroristas se va a poner en marcha "un tratamiento de carácter intensivo e individual y con suficiente continuidad temporal" donde el trabajo corresponde prácticamente en exclusiva a los funcionarios de vigilancia. Con este grupo dice la instrucción " resulta fundamental la acreditación del rechazo a la violencia y la desvinculación de la organización criminal, siendo en cualquier caso reversible la participación en el Programa, si la actitud del interno fuese contraria a los objetivos de reinserción planteados".

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Con el Grupo FIES B y C se plantea un tratamiento conjunto aunque "se distinguen las tendencias a la captación y el proselitismo y los que son vulnerables y con riesgo". Este programa contempla "la posibilidad de emplear internos de apoyo musulmanes con elementos de protección que puedan contrarrestar aquellos factores de riesgo que presentan los internos objetos de tratamiento".