La Justicia británica obliga al gobierno a contar con el Parlamento para la salida de la Unión Europea
El gobierno dice que esto no paralizará la intención de invocar el artículo 50 para negociar la salida a partir de marzo
El gobierno británico ha respondido a la decisión del Tribunal Superior sobre las competencias para invocar el artículo 50 pidiendo esperar a la apelación y sin parar el proceso hasta entonces. Un portavoz de la primera ministra Theresa May asegura que siguen adelante con su intención de invocar ante las instituciones europeas el artículo 50 a partir de marzo.
El Tribunal Superior británico ha publicado este jueves por la mañana su dictamen en el que considera que el gobierno debe recibir autorización del Parlamento antes de iniciar ese proceso.
En un veredicto histórico, los jueces dieron la razón a un grupo de ciudadanos que cuestionan que el Ejecutivo pueda iniciar el proceso de desconexión de la UE sin convocar previamente una votación parlamentaria. Se prevé que el Gobierno recurra este dictamen desfavorable ante el Tribunal Supremo, la máxima instancia judicial del Reino Unido, que se espera que pronuncie su fallo con la máxima urgencia, seguramente antes de finales de año.
La ambigüedad del artículo 50 del Tratado de Lisboa, que establece que un Estado puede dejar la UE "de acuerdo a sus propios requerimientos constitucionales", ha llevado a un desacuerdo entre los expertos legales en un país que no cuenta con una constitución escrita.