Otro fracaso europeo en Marte
La Agencia Espacial Europea fracasa en su nuevo intento por hacer aterrizar en Marte un módulo. El “Schiaparelli” falló en los últimos segundos y, por ahora, no se sabe la causa.
Madrid
El problema ha estado en los últimos segundos del descenso. Tras un viaje de siete meses, el módulo “Schiaparelli” entró en la atmósfera de Marte a una velocidad “estratosférica” de 21.000 km/h y, de este modo, inició lo que los técnicos llaman los “6 minutos de terror”, porque la velocidad tiene que reducirse a apenas 3 metros por segundo en este corto periodo de tiempo, para evitar un impacto fatal contra el suelo marciano. Pues bien, según la señal que el propio módulo europeo envió a la Tierra, el paracaídas se disparó y todo parecía funcionar bien hasta la fase final de la caída.
En una rueda de prensa realizada en Alemania, donde está el centro de control de esta misión, los responsables de la Agencia Espacial Europea (ESA) han explicado hoy que el módulo de aterrizaje Schiaparelli “no se comportó como esperaban en la parte final de la secuencia de descenso” y que aún tienen que analizar más tiempo los datos.
¿Se estrelló?
En esta ocasión, y después de otro sonoro fracaso, la ESA había optado por utilizar un innovador sistema de aterrizaje en Marte usando la densidad de la atmósfera para frenar la cápsula y, de este modo, poder ahorrar combustible con los retrocohetes.
Sin embargo, en la secuencia final, algo falló. Algunas fuentes apuntan que el paracaídas se desplegó demasiado pronto y que los retrocohetes (que debían frenar la caída al final) también funcionaron durante menos tiempo de lo previsto: sólo se encendieron durante 3 de los 30 segundos previstos.
Sin embargo, la ESA todavía no ha confirmado si el módulo consiguió aterrizar ayer por la tarde (16:45, hora española) o acabó estrellándose contra la superficie del planeta rojo, como ocurrió en el 2003 con la sonda Beagle-2, de fabricación británica.
De momento, la ESA seguirá intentando contactar con esta cápsula y la NASA también podría usar una de sus sondas en órbita de Marte para hacer imágenes del lugar del descenso, en un intento de localizar este módulo, aunque su pequeño tamaño convierte esta tarea de búsqueda en algo realmente difícil.
Éxito parcial
Pero la misión “ExoMars 2016” tiene un segundo protagonista que no falló: la nave no tripulada que llevó a bordo el módulo Schiaparelli, el Orbitador de Gases Traza (TGO) sí logró insertarse en la órbita de Marte con normalidad y ya ha enviado señales a la Tierra.
El Orbitador ha alcanzado su destino y era necesario cambiar su trayectoria mediante una compleja maniobra de frenado para que pudiera ser capturado por la gravedad del planeta rojo.
Hasta ahora, sólo 8 misiones en la historia han conseguido aterrizar en la superficie de Marte y enviar señales de vuelta a la Tierra. De momento, la ESA sigue sin lograr esta auténtica “hazaña técnica”.
![Javier Gregori](https://s3.amazonaws.com/arc-authors/prisaradio/d0748432-a871-485b-a177-c92e152a42bc.png)
Javier Gregori
Periodista especializado en ciencia y medio ambiente. Desde 1989 trabaja en los Servicios Informativos...