"Fallo absolutamente innegable" en la protección de la última mujer asesinada
La presidenta del Observatorio cree intolerable que muera asesinada una víctima que denuncia
Madrid
La presidenta del Observatorio contra la Violencia de Género, Ángeles Carmona, ha reconocido que ha existido "un fallo absolutamente innegable" en la protección de la joven asesinada por su expareja en Zaragoza.
Carmona ha clamado que "no se puede permitir que una mujer que ha realizado el acto heroico de denunciar los malos tratos, que es una cuestión muy difícil, muera asesinada cuando esta bajo la protección del Estado".
La joven Soraya, de 37 años fue asesinada a tiros por expareja quien posteriormente se suicidó también con el arma de fuego. Sus cadáveres aparecieron ayer en el bar Planet de Zaragoza donde la víctima trabajaba como camarera.
Ella lo había denunciado hacía apenas quince días. La había amenazado de muerte con una pistola y a su hijo, de cinco años, le dijo "voy a llevar a tu madre a un viaje muy largo del que no va a volver". A raíz de la denuncia, fue detenido y posteriormente el juzgado lo dejó en libertad con una orden de alejamiento de 500 metros.
La valoración policial de la situación de Soraya fue calificada como un caso de "riesgo no apreciado". Consideró que el riesgo que corría la joven era mínimo porque el tipo vivía a 400 kilómetros de Zaragoza, en Medina del Campo.
De las trece mujeres asesinadas este 2016 (aunque el Gobierno mantiene todavía en investigación dos de los casos) solo habían interpuesto denuncia tres. Soraya fue una de ellas y no le sirvió de nada.
El Observatorio del Consejo del Poder Judicial reconoce hoy que esta mujer maltratada no estaba suficientemente protegida y anuncia que estudiará los fallos y errores. Hay que recordar que este organismo emitió un revelador informe con el análisis de los fallecimientos de mujeres en 2014.
Ese informe del Observatorio de diciembre de 2014 indicó fallos policiales en los asesinatos machistas cometidos ese año. En 14 casos en los que la mujer había presentado una denuncia, la policía no acertó en la valoración del peligro y no consideró que la víctima corría un riesgo alto con su agresor. La policía calificó su situación como riesgo "no apreciado" o "bajo". Esta valoración es la que determina que medidas de seguimiento que se adoptan para proteger a la victima.
El Observatorio pidió entonces la revisión del cuestionario policial, una mejora que se sigue retrasando a pesar de que el Gobierno lo anunció hace casi dos años. Además, solicitaba que se grabase el testimonio de la víctima durante la investigación porque también la mayoría de las mujeres se negaron a declarar contra su pareja en el juicio.
El informe destacaba asimismo que ocho de las catorce mujeres asesinadas reanudaron la convivencia con su agresor después de presentar la denuncia. Y alertaba de otros fallos preocupantes: en un caso el parte médico de lesiones llegó al juzgado 24 horas después del crimen y en otros dos la fecha del señalamiento del juicio rápido se demoró hasta ocho meses.