La OCDE pide una acción contundente de los gobiernos ante el frenazo de la economía mundial
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Gráfico del estacamiento que está experimentando la economía este 2015. A la izquierda, las economías avanzadas; a la derecha, las economías emergentes en las que se incluyen Brasil, Chile, China, Columbia, India, Indonesia, México, Rusia, Turquía y Sudáf / OCDE
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París
Ante la atonía de la economía mundial la OCDE exige “una respuesta contundente de los poderes públicos, porque la acción de los bancos centrales ha demostrado no ser suficiente”. La degradación de las perspectivas mundiales desde noviembre es generalizada y afecta tanto a las economías más avanzadas como a las emergentes, mientras los riesgos de inestabilidad financieros son considerables, señala la organización que engloba a 34 países.
La OCDE rebaja al 3% la previsión de crecimiento mundial para este año y al 3,3% para 2017, son tres décimas menos sobre el pronóstico realizado el pasado otoño. Este aumento anual del 3% del PIB global sería similar al de 2015, que supuso el ritmo más lento en cinco años.
Según este análisis de la OCDE que incluye al G7 (donde no está España) y a los tres grandes emergentes (China, India y Brasil), el PIB de Estados Unidos avanzará el 2,2 % y el de la zona euro el 1,7%. Alemania a la cabeza (1,7%) y Francia (1,5%) e Italia (1%) por detrás.
“Los indicadores recientes son decepcionantes y dejan entrever una ralentización de la economía en ciertas economías importantes, pese al efecto positivo que ejercen los bajos precios del petróleo y de los tipos de interés”, ha declarado la economista jefe de la OCDE, Catherine L. Mann. “Por eso es urgente que los poderes públicos, de manera colectiva, reaccionen con urgencia poniendo en marcha políticas presupuestarias y estructurales propicias al crecimiento con el objetivo de dinamizar la expansión y minimizar los riesgos financieros”, añade Mann.