Expresident Mas, president Puigdemont

Barcelona

"Mas no quiere cargos, seré expresident". Así de claro lo ha dejado, desmintiendo los rumores que lo situaban como consejero del futuro gobierno. "Nada de nada. La Presidencia no es una subasta, no se trata de cambiar un cargo por otro”, ha dicho el ya expresident en funcione de la Generalitat en su comparecencia ante los medios. Una comparecencia en la que Mas ha concretado, sin embargo, que "esto no quita que quede a disposición del Parlamento y del futuro presidente, con todo y para todo".

Futuro president, que será el alcalde de Girona y presidente de la Asociación de Municipios por la Independencia, Carles Puigdemont, "que ejercerá la función con todas las consecuencias, en el que tengo confianza plena y que tiene muy claro el proyecto de país” en palabras del propio Mas.

Dice Mas que se dedicará a rehacer a fondo Convergencia y todo lo que representa y que deja "una puerta abierta de cara al futuro”. “No me retiro de la política", ha apuntado. Y todo ello a cambio de un "compromiso por escrito de estabilidad parlamentaria" con la CUP: los anticapitalistas no votarán en ningún caso en el mismo sentido de los grupos contrarios a la independencia y dos de sus diputados "se incorporarán a la dinámica parlamentaria de Junts pel Si”. Dice Mas que con ello "se da la vuelta a la tortilla y lo que en las urnas no se dio (la mayoría absoluta de Junts el Sí) ahora lo hemos tenido que corregir con la negociación".

Además, la CUP deberá entonar públicamente el ‘mea culpa’ y eso pasará por la renovación de algunos diputados: "Es la forma explícita que la gente entienda que se asumen los errores"

Mas ha querido remarcar que "el acuerdo nos da un horizonte de tranquilidad y estabilidad. Podremos ir al grano, el proceso queda salvado y el proyecto está vivo”. Políticamente, dice, "no es una decisión fácil ni agradable, pero es consecuente".

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Mas reconoce que era "parte del problema"

Este domingo, en su último discurso como presidente de la Generalitat ante el Consell Nacional de CDC, Mas ha justificado su renuncia en aras de la estabilidad del futuro Govern y ha avisado a la CUP de que él y "todos" en CDC estarán atentos para "denunciar" si el partido antisistema no cumple sus compromisos del pacto cerrado con 'JxSí', que permite la investidura de Carles Puigdemont esta tarde.

Mas ha admitido que se había convertido en un "problema" para el acuerdo, por lo que cedió la candidatura a la presidencia al alcalde de Girona, Carles Puigdemont, para que pueda disponer de un Govern con estabilidad parlamentaria "Un Govern bien asentado en casa, para cuando se tenga que enfrentar a los adversarios poderosos que actúan de mala baba", ha añadido.

En este sentido, ha dicho que "la estabilidad en este momento es una condición sine qua non" para que se pueda hacer el trabajo "bien hecho" en el proceso soberanista y ha avisado de forma velada a la CUP: "Si alguien no la cumple estaremos todos y también yo para denunciarlo".

El líder convergente ha afirmado no sabe si el acuerdo "es un milagro" pero en todo caso "es una solución y nos lleva a un beneficio concreto muy grande" y este es, ha dicho, que "el mandato recibido en las urnas -el 27S- es viable, tiene fuerza, tiene camino".

Antes de iniciar su discurso, Mas ha recibido una ovación de más de cuatro minutos de los consejeros nacionales con gritos de 'president' e 'independencia'. "Os tengo que confesar que nunca me habían aplaudido tanto como tras mi dimisión", ha bromeado.

El presidente catalán ha celebrado que, tras dar su "paso al lado", el proyecto soberanista vaya "hacia adelante" y que "la constitución de un estado vuelve a ser posible en este momento si hacemos las cosas bien" Y en este contexto, ha lanzado un mensaje al Estado: "Los que ya se frotaban las manos y tenían el cava a punto, si es que era cava, para bebérselo a la mala salud de Cataluña, lo tendrán que guardar en la nevera por muchos años".