Rivera asegura que los que creyeron en Suárez, Felipe y Aznar votarán naranja
El líder de Ciudadanos llama a una movilización masiva el 20 de diciembre y pide el voto de los abstencionistas, de los jóvenes y de los "pocos votantes" que queden al PSOE y al PP
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Madrid
Albert Rivera ha conseguido este domingo superar uno de los principales retos de la campaña electoral, llenar el palacio de Vistalegre de Madrid de más de 9.000 personas, todas ellas agitando banderolas de un partido que hasta hace menos de un año sólo tenía representación en Cataluña. El 13 de diciembre será para la formación el día en el que los presentes en ese recinto, se pusieron en pie, se cogieron de las manos y se conjuraron prometiendo no parar hasta la victoria. El enclave en el que se hacía el ritual también estaba cargado de simbolismo. El Vistalegre acogió al mejor PSOE y fue testigo de grandes tardes de gloria para Felipe González. También Podemos celebró en ese recinto del barrio popular de Carabanchel su asamblea constituyente.
El candidato de Ciudadanos, más nervioso de lo normal, llamaba a una movilización masiva el 20 de diciembre, consciente de que como reconocen en su partido la victoria pasa por una participación excepcional, del 80 por ciento al menos. Frente al discurso del miedo, utilizado por PP y PSOE argumentando que los partidos nuevos no están preparados, Rivera hacía un llamamiento. “Quiero que vote todo el mundo” […] “Algunos quieren que los jóvenes por primera vez no voten, algunos quieren que nuestros mayores den por bueno el resultado”, “no nos arrepintamos el día siguiente de que por muy poco siguen los mismos”, “esta ola del cambio que ha llegado y que se siente no se puede quedar a las puertas de la victoria”. “Tenemos que llegar al récord histórico de participación”.
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Rivera volvía a hacer referencia al pasado para presentarse como el único candidato con un proyecto de país. El líder de la formación naranja recordaba las aportaciones de los primeros gobiernos de la España democrática. La reconciliación de Adolfo Suárez, los derechos y libertades de Felipe González, o la modernización de José María Aznar. “España tiene que volver a recuperar el rumbo”, decía para apelar a aquellas personas que se sintieron identificadas con los expresidentes. “Estoy convencido de que muchos de los votantes de esos proyectos, votantes de la UCD, del PSOE o del PP, hoy ya es naranja, hoy ya va a votar a Ciudadanos”.
El aspirante a La Moncloa, que casi no hizo referencia directa a Rajoy o a Pedro Sánchez, dejó claro que no quiere la experiencia que echan en falta sus rivales. “Tiene razón el presidente cuando dice que somos inexpertos, nadie como él tiene tanta experiencia en saquear cajas de ahorro, nadie tiene la experiencia en paro del señor Zapatero, no sabemos arruinar Comunidades Autónomas o enviar presupuestos falsos a la Unión Europea”. “Tenemos la experiencia de la sociedad civil española y por qué no pensar que gente con prestigio, gente experta que quiere cambiar su país pueda participar en su gobierno”. “Quiero un gobierno de los mejores porque no le tengo miedo al talento, sino a la mediocridad”.
Rivera que además ensalzó sus años de trabajo en el Parlamento de Cataluña afeó a PP y PSOE su “nulo papel en la defensa de la unidad” en su Comunidad. “Supongo que para algunos estar en Cataluña, presidir un grupo parlamentario y plantar cara al nacionalismo no vale”. “Supongo que para algunos no vale porque ya dan por descontado que en Cataluña no tienen nada que hacer”. “Somos nuevos pero no somos novatos”, reiteraba Rivera.
