Abraham Mateo: “Me siento bastante prejuzgado”
Entrevista con Abraham Mateo que repasa sus inicios en televisión, confiesa su deseo de retomar la interpretación y habla de su nuevo disco
Madrid
Abraham Mateo (San Fernando, Cádiz. 17 años) no se va a ir de la entrevista. No se va a levantar sin motivo aparente para finiquitar la charla. No va a hacer un Justin Bieber. Al contrario, la vive como si fuera la primera que le realizan en su vida. Nada más lejos de la realidad. La agenda de las últimas semanas, entre atender a medios, acudir a firmas con fans y diversos actos promocionales para presentar su cuarto disco ('Are you ready?', Sony Music) agotaría a la persona más vitalista. Ni un mal gesto, ni una salida de tono. Abraham sonríe y se vuelca para que la entrevista salga lo mejor posible y se convierta en un agradable rato de conversación.
Es complicado enfrentarse sin prejuicios a un encuentro con este chaval de 17 años, nacido de programas de televisión, que mueve masas -especialmente de adolescentes-, y de quien todos se atreven a opinar. Educado, afable y con un inequívoco acento gaditano, Abraham ayuda a derribar, desde los primeros minutos, todas las ideas preconcebidas que el entrevistador tenga en su cabeza.
Con él, Susana -su madre-, que permanece a su lado sin inmiscuirse en la entrevista. Ha sido su fiel compañera en todos estos años de carrera profesional. Este niño prodigio de la televisión andaluza coqueteó también con la interpretación, se metió en la piel de Raphael en la miniserie que Antena 3 dedicó al cantante jienense (2010). Ahora, Abraham muy centrado en su carrera musical, no descarta beber, de nuevo, del dulce veneno del oficio actoral.
Y después está Tony, su hermano mayor. Con el que se le cae la baba. Afirma de él que es su maestro, su gurú del ligoteo y la persona con la que más se ríe. Con Tony al lado, Abraham tiene la confianza como para convertirse en gladiador romano: "Me llamo Máximo Décimo Meridio, comandante…", dice Abraham Mateo imitando el famoso discurso del personaje protagonista de 'Gladiator'. "Es una de nuestras películas favoritas", confiesa.
Casi tres cuartos de hora de charla en torno a una mesa en una pequeña sala de la redacción de la Cadena SER. Son pasadas las ocho de la tarde. La agenda de Abraham continúa. Deberá atender a más medios antes de poder llegar al hotel y descansar. Al día siguiente, cambio de ciudad y vuelta a empezar. Después, a cruzar el océano para continuar con la promoción del disco. Más tarde vendrá la agotadora gira de conciertos. Tiene 17 años. Todo el mundo opina de él y así seguirá ocurriendo. Es el precio del éxito y de la fama que él digiere con una total y asombrosa profesionalidad. Abraham termina la entrevista con un espontáneo abrazo a su entrevistador y una gran sonrisa.
¿Qué no tendría que hacer para que no abandonases esta entrevista?
[Sonríe] ¿Sabes qué? Nunca me ha dado por coger e irme de una entrevista y creo que nunca me va a pasar. Por ahora, no he tenido ningún motivo para irme. He tenido la suerte de que nunca me han dicho nada incómodo en una entrevista.
¿Sigues siendo tan buen estudiante como he leído por ahí?
¡Hombre, claro! Para mí los estudios son importante. Estoy estudiando a distancia 2º Bachillerato, de Ciencias Sociales.
¿Es verdad eso de que estudias en el avión, en el tren, en el hotel…?
¿No te lo crees? [bromea] Sí, siempre que tengo hueco me pongo. Llevo la maleta de los libros a un lado y la de la ropa a otro. Con los estudios pa' lante siempre. Desde pequeño me han inculcado que los estudios son lo más importante y que sin estudios no hay música. Estoy en una edad en la que, aunque ya no sea obligatorio estudiar, es mi decisión. El mundo de la música es complicado. Unas veces puedes estar arriba, otras abajo… Nunca sabes lo que puede pasar, así que es mejor tener una segunda opción. Aunque la universidad no creo que la vaya a hacer…
¿Cuánto hace que no vas a clase todos los días a sentarte en un pupitre con el resto de compañeros, como hace cualquier chaval de tu edad? ¿Qué recuerdas de aquella época?
Pues hará tres años. Iba a un instituto que estaba al lado de casa. Yo bajaba de mi casa, cruzaba el paso de peatones y ahí estaba. Ahí he pasado unos años maravillosos. Me echaba unas risas con mis colegas increíbles.
Supongo que por esa época ya serías el chaval famosete del instituto…
[Asiente sonriendo] Sí, el famosillo del instituto.
¿Te incomodaba?
Sí, me incomodaba en el sentido de que, por ejemplo, en los recreos venían niñas con los cuadernos a pedir que les firmara; eso no me molestaba, pero los demás niños del recreo me miraban como "qué hace este niño aquí, el tonto este, firmando…". En realidad yo no tenía la culpa de que me pidieran autógrafos y, claro, no me iba a negar a firmarlos… Llegaron incluso a ponerme seguridad en el colegio y por eso tuve que irme.
Creo que ahora casi siempre te acompaña un escolta. ¿Llegas a acostumbrarte o es complicado vivir así con esa sombra alargada…?
Te digo la verdad. Mi escolta se llama Roberto y yo no lo tomo como un escolta. Cada vez que estoy con él… [resopla], es como un amigo, como uno más de la familia. Me olvido de que es mi escolta y lo tomo como un colega. Nos echamos unas risas increíbles y no me molesta ver su sombra por ahí atrás. Me gusta estar con él.
¿Te vas a animar a animar a retomar la interpretación actoral? En la tv-movie de Raphael se te veían maneras y en los videoclips no es que lo hagas mal de actor…
Me gusta mucho la parte de la interpretación. Desde chico, hay vídeos míos con tres o cuatro años diciendo guiones larguísimos de las películas. Me encanta la interpretación. Hablé con Manu [Manuel Ríos San Martín] de eso, de hacer una película que fuera yo el protagonista de algún tema. Todavía no lo hemos hablado bien, pero lo tengo en mente y seguro que lo voy a hacer.
Me encantaría. Sobre todo, me gusta mucho las comedias románticas como '¿Conoces a Joe Black?', 'Todos los días de mi vida', 'El diario de Noa'… Y también de acción. Mi película favorita es 'Rocky Balboa'. Así que… a lo mejor, una peli de boxeo. Yo estuve apuntado a boxeo un par de meses. [sonríe]
¿Te gustaría hacer algo de actor de cara al año que viene, al 2016?
Me molaría mucho.
¿Y por qué dejaste lo del boxeo?
Aparte de porque ya tenía muchas cosas, lo dejé porque le entrenador vino y me dijo que había aprendido muy rápido en esos dos meses y que ya podía hacer combates. Cuando me dijo la palabra combate… [pone cara de circunstancia y ríe]
O sea, que eres buen estudiante, que vas a boxeo y aprendes rápido… ¿Eres de estas personas listas por naturaleza?
No sé, pero a todo lo que le pongo empeño y esfuerzo, siempre se me da bien. No sé por qué. La gente de mi alrededor me lo dice y yo lo pienso y creo que es porque le pongo mucho esfuerzo y cariño a todo lo que hago.
Tú "naciste" en un programa de televisión, has participado en decenas de galas… ¿ves ahora los talent show? ¿Qué te parecen?
Veo 'La voz', me gusta ver 'La voz' de otros países también… Yo creo que son una plataforma gigante para, por ejemplo, niños prodigio que se puedan dar a conocer. Yo para eso lo veo bien. Tanto para los niños como para los adultos. A mí me gusta conocer artistas nuevos, es lo bonito de esta carrera: aprender de otros artistas.
Sí, pero en esta entrevista tú has dicho que el mundo de la música es muy complicado. Cuando tú ves estos programas y oyes que se les dice a los participantes: "tú vas a llegar alto, tú tienes el talento para llegar seguro". Y así con todos, ¿qué piensas?
[Piensa] ¿Sabes qué pasa? Que yo sé que el mundo de la música es muy complicado, pero es que yo he tenido suerte. Una suerte tremenda. Nunca he tenido ningún altibajo. Ha ido todo in crescendo desde los 7 años, nunca ha habido un "no" o algo que me haya hecho venirme abajo. He tenido mucha suerte.
Hay mucha gente a la que le cuesta muchísimo llegar hasta donde estoy yo. Eso no quiere decir que no me haya forzado, he trabajado muy duro para llegar hasta donde estoy, pero la suerte me ha acompañado siempre.
¿Nunca te han ofrecido ser coach para alguno de estos talents?
Sí, me llamaron de un programa de Colombia para ser jurado durante cuatro meses. Yo veía que aquí tenía que dejar un montón de cosas y proyectos. Creo que para ser coach tengo toda la vida. Ahora es el momento para centrarnos en la gira.
¿Te daría vértigo juzgar a otros artistas en un talent show? Porque ese es el rol que tendrías que ocupar
No sé… No creo que me diese vértigo, pero sí que tendría cuidado en cómo decir las cosas. Creo que las formas son muy importantes. Pero siempre diría la verdad. No mentiría, diría lo que me pareciese en ese momento.
¿Eres sincero?
Muy sincero
Entonces imagino que te gusta que la gente que te rodea sea sincera… ¿hasta qué punto sientes que todo el mundo te dice que todo lo haces bien?
Es que me doy cuenta. Me doy cuenta de las personas que vienen por conveniencia y de las personas que me quieren de verdad. Tengo un ojo muy crítico para eso. Me doy cuenta de cuándo una persona se acerca y por qué.
¿Qué te enfada? ¿Qué te pone de mal humor?
Las mentiras. Esto que me dices, que la gente no sea sincera y me mienta.
¿Te sientes prejuzgado? Si yo digo que me gusta la música de Abraham Mateo, probablemente muchos me miren mal…
Sí, sí. Bastante. Hay mucha gente que da su opinión sobre mí sin ni siquiera haberme escuchado, sin ni si quiera conocerme, ni haber leído una entrevista mía… Pienso que tengo toda la vida para demostrar mi talento, lo que sé hacer… Por eso, si esa persona quiere criticarme, que sea después de conocerme o después de haber visto un concierto mío de escucharme. Tampoco me molesta, ¿eh?
Tienes un hermano, Tony, y he leído por ahí que lo admiras. ¿Por qué te provoca Tony esa admiración?
Porque él ha sido mi maestro. Con él he aprendido todo. Me ha dado muchos consejos y comparto muchas cosas con él. Es con la persona que más me río del mundo. Lo admiro no solo como artista, sino como persona también.
¿Qué te hacer reír a ti?
Pues cuando estoy con mi hermano, todo [sonríe]. Hay mucha conexión… A él le pasa lo mismo. Si le preguntas, te dirá que soy la persona con la que más se ríe. Es la verdad.
¿Tiene momentos de hermano mayor? ¿Qué consejos te da?
Él me da muchos consejos, pero que tengan que ver con mi música. Me dice cosas como "todos los títulos de tus canciones deberían ser en español". Cosas así. No son consejos de sabio, son más coloquiales.
Supongo que estando en una edad para ligar… en eso sí que te dará consejos…
¡Por supuesto! Él también ha sido mi maestro en eso [ríe]. Me ha enseñado hasta trucos. Una cosa que siempre me ha enseñado, me lo dijo hace mucho tiempo y nunca me olvidaré: "siempre que vayas a besar a una niña, un chicle de menta en la boca. Siempre, Abraham, siempre" [ríe]
Tu nuevo disco se llama 'Are you ready?' ('¿Estás preparado?'), ¿tú te sientes preparado para entrar en una nueva fase de tu carrera profesional? Una fase más adulta y, seguramente, con más responsabilidad.
Creo que estoy preparado. Llevo desde los 7 años subiéndome al escenario por eso siento que estoy preparado. Hago muchísimos viajes fuera, a Latinoamérica. La promoción allí es muy intensa. En realidad, todo está comenzando a hacerse más intenso y más duro. Cada vez hay más viajes. Pero yo los disfruto así que no se me hace un incordio, no me cansa.
Ahora que ya estás dejando de ser un niño, ¿hasta qué punto -además de componer canciones- tienes peso en la elección de cómo ha de ser un disco tuyo? ¿Hasta qué punto puedes tomar decisiones sobre tu música? Imagino que en el primer disco delegarías más y ahora quizá puedas ser más cabezón con algunos aspectos…
¡Totalmente! Lo acabas de decir. Cuando hice mi primer disco, a los 10 años, no era muy consciente de lo que estaba pasando. Era consciente de que estaba grabando un disco, pero no controlaba todo el tipo de mezclas, composición, producción… Me gustaba meterme al estudio y cantar. Y ya.
Cuando me fui haciendo más mayor, en el siguiente disco (con 14 años) ya me di cuenta de que había un proceso importante. Me metí en la composición, en la producción… Tengo la suerte de tener bastante peso; en lo que digo, mi productor me hace muchísimo caso y puedo tomar decisiones en la producción, puedo componer… Me siento muy libre a la hora del proceso.
En este tu cuarto álbum de estudio, tercero con Sony Music, ¿cuál era tu empeño? ¿Qué era lo que tú querías que, específicamente, tuviera este nuevo disco?
Para este disco fuimos a componer a Londres y estuvimos también en Los Ángeles. Estuvimos con productores muy importantes. Yo le decía a Jacobo que quería letras más atrevidas, más adultas… Yo lo sentía así. Voy creciendo, voy madurando y siento que las letras deben ser más adultas porque tienen que ir conmigo.
Quería ritmos más británicos, de ahí la idea de ir a Londres. Se nota muchísimo la influencia british en este disco. Hay canciones muy comerciales, también baladas latinas, una de r&b, reggae… Nunca había tocado ese estilo y me ha gustado bastante.
¿Te atreves con todo?
Con todo [ríe]
¿Has podido conocer a Bruno Mars ya? Sé que es uno de tus ídolos…
A puntito, pero todavía no. Me nominaron a los premios Juventud de Miami. Actué allí y él también estaba nominado, pero no pudo venir. Estuvieron Jennifer López, Ricky Martin, Pitbull… Pero él no fue.
¿Es tu artista favorito?
Sí, Bruno Mars… Lo tengo clarísimo. Para mí, lo que diga Bruno, va a misa [ríe]
En el videoclip de tu primer single de este disco, 'Old School', sales con una estética retro, años 50… ¿Por qué?
Me apetecía hacer algo así. Está habiendo un boom con lo retro, que está volviendo… Y como mi ídolo es Bruno Mars y tengo esa influencia de él y de su música… me apetecía muchísimo. Creo que gracias a esto no solo estoy llegando a mis fans, también a otros públicos, a gente más adulta que me ha venido a decirme que les gusta lo que estoy haciendo.
¿Te acuerdas de la primera vez que pisaste un estudio de grabación?
Sí [sonríe]. El primer día que pisé un estudio de grabación fue el día en que murió Michael Jackson. Tenía muchos nervios. Recuerdo pisar el estudio y el corazón latiendo a mil. No era muy consciente de lo que hacía, pero yo sabía que iba ahí a hacer algo que me gustaba: cantar. Lo disfruté mucho.
¿Qué te seduce más, qué te provoca más mariposas en el estómago: ir a un estudio de grabación para un nuevo disco o subir a un escenario?
Subirme al escenario. Grabar para mí es un proceso mucho más relajado, ya no paso nervios a la hora de meterme en un estudio de grabación. A la hora de subirme a un escenario, sí. Le tengo muchísimo, muchísimo respeto al escenario. Me produce mucha responsabilidad porque soy muy perfeccionista. Creo que eso es un defecto, pero me resulta inevitable.
¿Te pones muchos peros a ti mismo?
Muchísimos… Siempre he sido así. Desde chico, a todo lo que hago me he autoimpuesto mucha presión, mucha responsabilidad. No quiere decir que no lo disfrute, pero me gusta hacerlo siempre todo perfecto.
¿Qué haces para despresurizare? Para aliviar esa tensión…
Me gusta mucho componer. Me desestreso muchísimo, es lo que más me relaja: componer. También me pongo con los jueguitos del iPhone y las redes sociales. Me relajo viendo vines, vídeos, hablando con los fans…
¿Aprendes algo de lo que te dicen tus fans? Por muy locas y locos que parezca que están…
Yo es que he sido fan, por eso sé lo que ellos sienten. Cada vez que estoy con un fan es como que me meto en su cuerpo y siento lo que él está sintiendo. Y lo que procuro es que el momento de estar conmigo de ese fan sea mejor de lo que él o ella se haya imaginado que hubiera podido ser ese encuentro. Intento que se llevan un buen recuerdo. Mucho respeto y mucho cariño.
En la firma de discos, no puedo dejar pasar a un fan sin darle un beso, un abrazo, una foto, una firma y otro abrazo. Y así sean las que sean.
En ese momento de la Nochevieja en el que justo cambiamos de año, en el que pasaremos de 2015 a 2016. ¿Qué es lo que vas a pensar? ¿Qué es lo que te gustaría que ocurriera en el futuro?
Pues, en este mismo momento, pediría salud para toda la familia. Es lo más importante para mí. En los fin de año, siempre me siento al lado de mi hermano en casa de mi abuelo y nos agarramos la mano y pedimos cosas para el año siguiente. Es como una tradición que tenemos. Pedimos locuras: vender no sé cuantos discos, colaborar con tal artista…