El PP aplaude la fiesta, pero pide activar la maquinaria electoral con urgencia
Este lunes Moragas celebra su primer Comité de Comunicación para las generales en Génova. A partir de la disolución de las Cortes, se elaborarán las listas y se conocerá el proyecto. Pero muchos populares creen que ya se va con retraso en todo. Además, piensan que con los nervios por las candidaturas, los comentarios sobre posibles sucesores y los enfrentamientos entre el G-8 y Sáenz de Santamaría, es muy difícil cerrar una crisis interna por mucho que Rajoy quiera
Madrid
Después de la semana negra del PP, los populares llegaron a la cita del sábado en Toledo con cierta expectación. El encuentro estaba diseñado para que Mariano Rajoy hiciera balance de estos años de legislatura. Pero terminó convirtiéndose en un acto de “autoafirmación”.
Rajoy entró tocado por la crisis interna y salió entronizado, como el único y el mejor candidato que se puede presentar a las generales. Como si no hubiera pasado nada, muchos aplausos, sonrisas, una fiesta y apoyo total. Los ministros tan amigos. Las preocupaciones a un lado. Una foto de unidad, que se ha repetido muchas veces en estos últimos años. Sobre todo después de cada cita electoral en la que se sufría una nueva pérdida de votos y comenzaban a elevarse las críticas.
El presidente se fue de viaje y al volver se encontró todo patas arriba. Así que tocó a rebato y con sus palabras dio una instrucción implícita: todos quietos y callados, a trabajar porque están en juego las generales.
Todos salieron convencidos, arengados, pero con las horas se fueron desinflando como un soufflé. “Es más de lo mismo”, señala un diputado. Para otro compañero suyo hay que “cambiar las cosas” pero, resignado, comenta que ya no hay tiempo para nada.
Están bastante desmotivados. Tienen dudas y pocas esperanzas de remontar. El derrotismo se va instalando en las filas conservadoras. Tanto que hasta en la cúpula popular reconocen que es “muy duro darlo todo“, sabiendo que se hace para obtener un resultado con el que tal vez no se pueda formar Gobierno.
La celebración del sábado sirve para dar ánimos pero son momentáneos. Por eso los populares piden a Rajoy que active “de forma urgente” la maquinaria. Y hoy, por la tarde, Jorge Moragas ha convocado la primera reunión del Comité de Comunicación en Génova. Se va a conocer pronto el Comité de Campaña. Y a partir de la semana que viene, una vez se disuelvan las Cortes, se procederá a elaborar las listas y presentar el proyecto.
Los populares, sobre todo a nivel territorial, creen que van con mucho retraso respecto al resto de formaciones. Todos recuerdan como en las europeas se esperó hasta el último minuto para nombrar candidato a Miguel Arias Cañete y se desesperan. Aunque los que rodean a Rajoy defienden su estilo y tachan a los demás “de injustos” porque sólo piensan en “salvar sus puestos”.
Lo que nadie cree es que se pueda mantener esta paz impuesta. Dan por hecho que se dispararán los nervios por ir en las candidaturas y que estallará algún lio porque no se hace más que hablar de posibles sucesores con Rajoy aún al cargo. Por ejemplo, este martes, con un acto de Cristina Cifuentes y Alberto Núñez Feijóo. Ya temen la lectura política que se puede hacer de ello, porque son los dos cargos con mayor proyección política.
Pero es que además se vive una calma tensa porque ahí está el G-8, el grupo de ministros amigos personales de Rajoy, enfrentado a Sáenz de Santamaría. Por lo visto estos no llevan nada bien lo que denominan “su operación triunfo”, tras ver todas las apariciones de la vicepresidenta y les queda Planeta Calleja. Mientras, los colaboradores del presidente aseguran que está bien informado de todo y él no ve “conspiraciones” para derrocarle.