El Gobierno ve a Cataluña abocada a unas nuevas elecciones
El Ejecutivo cree que la situación tras las elecciones catalanas no ha cambiado porque, en realidad, nunca ha dejado de empeorar
Madrid
Por mucho que la CUP apriete, y pida que se rompa con el estado español, el Gobierno cree que la situación no ha cambiado porque, en realidad, nunca ha dejado de empeorar.
Ahora mismo, apuntan, todo sugiere que Cataluña va a verse abocada a unas nuevas elecciones. Las respuestas jurídicas ante cualquier movimiento ilegal están listas, y aunque el Ejecutivo es consciente de que, entre la convocatoria de elecciones generales y la constitución de un nuevo gobierno, se abre un tiempo delicado, recuerdan que en realidad en España los periodos electorales ocupan siempre un corto espacio. Tres meses pasan volando, y además, recalcan, aquí la administración, a diferencia de otros países, no cesa, no desaparece.
La campaña tensionará las cosas, admiten, pero sea del color que sea, pronto habrá un gobierno legítimo y todo volverá a su cauce. Esto no es 1935, dicen. Aquí hay un estado sólido. No es el Salvaje Oeste. Hay gente que cobra las pensiones, que acude a los servicios públicos... No se puede hacer lo que te de la gana, advierten. Basta con recordar, apuntan, la que se montó esta semana cuando miles de usuarios no pudieron coger el AVE.