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A LA PARRILLA...

¿Por qué 'Masterchef' es más visto que 'Top chef'?

El talent de cocina de Antena 3 es incapaz de llegar a los números del de TVE pese a emitirse en una cadena con mejor promedio

Jurado de 'Masterchef' / RTVE

Jurado de 'Masterchef'

Madrid

La 1 acumula 36 meses consecutivos sin ser capaz de llegar a los 12 puntos de media mensual: justo el mismo periodo de tiempo que Antena 3 lleva sin caer por debajo de esa marca. La pública acabó 2014 con una media de 10,0%; el primer canal de Atresmedia promedió en 2014 un 13,6%. ¿Qué explica que, de dos concursos de cocina -relativamente parecidos-, el más visto sea el de la cadena que más dificultados tiene en audiencia? ¿Qué provoca que 'Masterchef', en un teórico peor escaparate, luzca más que 'Top chef'?

'Masterchef' ha cursado ya tres ediciones en España. En número de espectadores, la mejor fue la primera (3.421.000 y 18,3%). El aterrizaje de 'Masterchef' no fue sencillo. En su segunda gala, el programa ya estaba por debajo de los 2 millones de espectadores y marcaba el preocupante dato de un 10% de share que se mantiene como su mínimo histórico. Sin embargo, La 1 cambió de día al programa, lo programó en la noche del martes, con el apoyo de las millonarias audiencias de la Champions League que le precedía. Y este talent show producido por Shine Iberia comenzó a crecer. Así hasta alcanzar en su final unas impresionantes cifras: 5.524.000 y 33,1% de cuota de pantalla. Era julio de 2013 y en Antena 3 ya se frotaban las manos con la fiebre gastro-televisiva, ellos estrenarían 'Top chef' unos meses después, en octubre.

La segunda temporada de 'Masterchef' flojeó en la media de espectadores (3.189.000) pero creció en la media de share (19%) respecto a la primera. El talent mantuvo su hegemónica posición entre los programas de cocina. En la tercera, concluida el pasado 30 de junio, 'Masterchef' obtuvo unos excelentes resultados (3,1 millones y 18,6%); sensacionales si se tiene en cuenta que se midió en la misma noche que se emitían las dos series más vistas de Antena 3 y Telecinco, 'Allí abajo' y 'El Príncipe'.

Por su parte, 'Top chef' (producido por Boomerang TV) promedió en su primera edición algo más de 2,9 millones de espectadores (17,8% de share). Las cosas fueron peor en la segunda entrega, donde los números bajaron hasta el 16,1% en share con una media de algo más de 2,5 millones de espectadores. Actualmente, Antena 3 está emitiendo la tercera edición de 'Top Chef'. Contra unos flojos rivales -'En la tuya o en la mía', de La 1 y 'B&b' en Telecinco-, el programa ha promediado en sus tres primeras galas una media de 2,2 millones y 14,7 puntos.

Es, por tanto, evidente que a 'Top chef' le resulta imposible situarse en los números de 'Masterchef' pese a emitirse en una cadena con mejores resultados de audiencias. Varios factores pueden explicar este hecho.

'Masterchef' ganó mucho con ser el primer gran concurso de cocina en llegar el prime time español. Esto no es sinónimo de éxito, pero si el tú producto consigue calar entre el público, el resto de formatos similares, serán percibidos como una copia o una variación; como poco, serán comparados.

En un programa seriado en el que el espectador -aunque esto no sea un punto vital- necesita tener un ligero conocimiento de qué ha ido ocurriendo en programas anteriores, el hecho de que exista una identificación entre concursantes y público es una añadido importantísimo. En 'Masterchef' compiten aficionados a la cocina que se ganan la vida en oficios relacionados con la hostelería o que nada tienen que ver con ella. Nunca se trata de cocineros profesionales. El espectador ve cómo alguien que podría ser su vecino, su hermano o su compañero de trabajo, sufre, compite, resuelve problemas, se frustra…

'Top chef' -y de eso presume el formato- no tiene cabida para aficionados, solo los mejor de lo mejor de las cocinas españolas entra en el plató del concurso de Antena 3; un elitismo que se traduce en los platos y pruebas que se realizan, que dejan al espectador medio muy lejos, no solo de lo que él podría hacer, sino de lo que él puede haber probado como comensal.

Esta deriva de la anterior. Al cocinero profesional se le presupone capacitado para elaborar platos y menús que dejen al espectador con la boca abierta. Se da por supuesto que todos los que concursantes de cada edición de 'Top chef' son auténticos maestros de la cocina que van a competir entre ellos y, quizá, puedan perfeccionar algunos ámbitos en los que estén más peces. En 'Masterchef' todos van a competir, pero siempre bajo el paraguas del aprendizaje. El error está muy presente en el programa de La 1 y el público incluso lo comprende.

Mientras que en 'Top chef' el acierto se espera y el error se penaliza mucho, en 'Masterchef' el acierto es recompensado muy positivamente por el espectador. Por tanto, existe una automática empatía con aquel concursante que, aficionado a la cocina, ha demostrado una clara evolución desde su llegada al programa hasta el final. El talent de La 1 tiene el gancho que crea ver cómo unas personas de la calle son capaces de superar sus límites en algo tan cotidiano como la cocina.

Jurado de la tercera edición de 'Top Chef'

Jurado de la tercera edición de 'Top Chef' / ATRESMEDIA

Jurado de la tercera edición de 'Top Chef'

Jurado de la tercera edición de 'Top Chef' / ATRESMEDIA

Tres ediciones de 'Top chef' y en ninguna se ha repetido el mismo jurado. En las tres ha estado integrado por Alberto Chicote, por Susi Díaz y por un tercero de gran prestigio, pero que ha ido cambiando sin razón aparente. Por contra, 'Masterchef' es inimaginable ya sin el equilibrio que aportan entre sí los caracteres de Pepe Rodríguez, Samantha Vallejo-Nágera y Jordi Cruz. El contar, además, con la figura del presentador (Eva González) deja al trío de cocineros bien delimitada su función: ser el jurado que juzgue, reprenda, felicite y aconseje a los aspirantes. Para bien o para mal, el público ya sabe qué puede esperar de los tres jueces de 'Masterchef'.

'Top chef' parece un programa más de Chicote. Eso le garantiza un colchón de espectadores bastante considerable, pero se echa en falta más presencia de los otros miembros del jurado. Por momentos, 'Top chef' es lo que Chicote sea: es la voz y el alma del talent de Antena 3.

Los consumos televisivos en el mes de octubre, que es cuando arranca 'Top chef' sus ediciones, continúan aún sin estar estabilizados al 100% y, por lo general, son inferiores a los que tienen lugar en abril, mes de arranque de 'Masterchef'

Por otro lado, el otoño es el comienzo del curso televisivo lo que significa que se trata de un auténtico dolor de cabeza para los programadores que alinean productos ya consolidados con nuevas apuestas. La parrilla parece un campo de minas en la que uno no sabe muy bien dónde situarse. En el segundo trimestre del año, los estrenos no son tantos y es más fácil que saber encajar en la parrilla un buen programa para que no compita con rivales que podrían dañarlo seriamente.

Es una de las principales críticas que ha recibido 'Masterchef' en esta tercera edición, que parecía haber dado un giro hacia el reality, con concursantes más propios de 'Gran Hermano' que de un talent de cocina. En 'Top chef', salvo excepciones (que sonaban poco espontáneas), los concursantes han mostrado una actuación más aséptica frente a las cámaras.

Obviamente, cualquier talent show es en sí mismo una variación de formato de telerrealidad. Las emociones y las estrategias de los concursantes conviven con las cámaras y el ojo del espectador. Elaborar un casting con personalidades sugerentes, que choquen, que llamen la atención, que provoquen rechazo, afecto… Es otra baza que sabe jugar 'Masterchef', aunque en Shine Iberia se estén excediendo ya un poco…

'Masterchef' ha sabido construir su marca más allá del programa de cocina. Aprovechó a la perfección el boom con el que concluyó su primera entrega, con esa final vista por 1 de cada 3 espectadores. 'Masterchef' empezó a cuajar como concepto. No solo es merchandising de libros de cocina, dvds, o delantales. 'Masterchef' es un sello de calidad. Lo han logrado asociándose con supermercados que venden la marca de 'Masterchef' como garantía de excelencia, con cadenas de restaurantes fast-food que elaboran una línea de productos gourmet bajo el sello de 'Masterchef' u organizando eventos en ciudades con niños y padres como cada vez que acuden al FesTVal de Vitoria a presentar 'Masterchef Junior'.

El formato con niños de 'Masterchef' le ha ayudado a la marca a tener una dimensión más familiar que conecta a la perfección con el target de La 1.

 
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