Otro encierro de vértigo
El cuarto encierro dejó un parte en blanco de traslados por lesiones a los hospitales
Pamplona
Si es verdad lo que dicen algunos taurinos sobre el entrenamiento previo al que son sometidos los toros destinados a Pamplona en las dehesas de origen, acostumbrando a la manada a correr largos trechos diariamente, el resultado se está demostrando este año en los encierros. La cuarta carrera, con los toros gaditanos de Fuente Ymbro, también estuvo por debajo de los dos minutos y medio, con un burel a la cabeza, 'Manirrota', de 550 kilos de peso, el único de pelaje negro en la manada muy vistosa, con cuatro castaños y un colorado.
Cuarto encierro de San Fermín (10/07/2015)
02:45
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Este toro negro llegó anticipado por un cabestro que salió disparado desde la mitad de la cuesta de Santo Domingo, rivalizando -y superando- en velocidad al Fuente Ymbro, que bajó sus humos cuando en la primera parte de la Estafeta tropezó con un mozo, resbaló sobre los adoquines y retrasó su carrera hasta quedar relegado al último puesto. Fue superado por sus hermanos que corrían en manada fragmentada lo que permitió a más mozos que lo habitual lucirse y apurar bellas carreras cerca de las astas.
Pese a que se vivieron sustos como el de un mozo que quedó empotado contra los lomos de 'Manirrota' cuando el bravo chocó por la inercia contra las protecciones de la curva de la Estafeta, el cuarto encierro dejó un parte en blanco de traslados por lesiones a los hospitales. Al menos desde el año 2010, fecha desde la que tiene datos el departamento de Salud del Gobierno de Navarra, no hay noticias de una mañana de sanfermines con parte hospitalario en blanco tras los encierros.
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