Florentino-Casillas: Una partida de póker
Pase lo que pase en las próximas fechas, Iker no saldrá del club de su vida como lo tendría que hacer una leyenda
Casillas y Florentino, durante un acto(GETTY)
Madrid
Era apuesta segura afirmar que el futuro de Casillas se iba a convertir en uno de los culebrones del verano. Con De Gea en capilla y Benítez diciendo en 'El Larguero' que Keylor Navas le parece un gran portero, las opciones que le quedan al todavía capitán blanco son mínimas. Si se queda cobrará el contrato que se ha ganado desde que era un crío parada a parada, pero verá los partidos desde la grada y sus opciones de ir a la Euro de Francia se evaporarían.
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Si se marcha tendrá el reto de empezar de cero, seguramente ganando algo menos de dinero, pero siendo más feliz en los últimos años de su maravillosa carrera. Y, de paso, obteniendo el reconocimiento que algunos le han negado injusta y sistemáticamente en sus últimas temporadas en el Madrid.
Lo que ya está claro es que, pase lo que pase en las próximas fechas, Iker no saldrá del club de su vida como lo tendría que hacer una leyenda: por la puerta más grande del Bernabéu. Como la que han tenido Xavi o Gerrard, por ejemplo.
Llegados a este punto de no retorno sería bueno para todos que la situación se resolviera lo más rápido posible. Cuanto más se alargue la partida más se puede enfangar todo. Las filtraciones interesadas de una y otra parte pueden terminar de ensuciar la marcha del mejor guardameta de la historia del club.
Casillas está luchando por su contrato con toda la razón del mundo. Lleva muchos años en ese vestuario y es consciente que del Madrid no se va perdiendo dinero nadie, ni siquiera el último de los utilleros. Y él no quiere ser el más listo, pero tampoco el más tonto. Florentino, que cuando el tema le interesa es de chequera rápida, es un maestro a la hora de hacer números y seguro que encuentra un punto de encuentro para resolver el entuerto.
Que se sienten en privado; que se digan las cosas a la cara, que se cierre el acuerdo que merece una institución como Iker y que se monte una rueda de prensa de despedida con todos los honores, acorde con lo que merece un icono que ha dado lustre al escudo durante las últimas 16 temporadas. Si tiene que salir que salga, pero hagamos las cosas bien por favor…
