Carlos Llamas, el calor de la radio

Madrid

Casi ocho años después de su muerte, este viernes hemos vuelto a recordar al amigo y al compañero. El Ayuntamiento de Madrid ha inaugurado al fin la glorieta que lleva su nombre. En su barrio de Canillejas de siempre. Cerca del que pronto será campo de su Atlético de Madrid. Con pocos bares en la zona, algo que a Carlos no le gustará demasiado.Pero no siempre se puede elegir.

Fui primero compañero y después amigo de Carlos. Sobre todo amigo, en los durísimos meses del final de su vida. Me tocó sustituirle en su Hora 25 -con mayúsculas, por favor- desde que ese fatídico 11 de septiembre de 2006 la enfermedad le separó casi para siempre del micrófono. En ese tiempo, casi un año, se estableció entre nosotros una corriente de confianza y confidencia mutuas, casi íntimas si no se entiende mal el término, que todavía hoy tengo muy presente.

Un grande de la radio

Carlos fue un grande de la radio. De los más grandes, junto con nuestro Iñaki o Luis del Olmo. Él lo sabía, pero el éxito no le nubló su personalidad. Personalidad difícil, por cierto. Cuando se cabreaba, se cabreaba de verdad. En eso nos parecíamos bastante, aunque a los dos se nos pasaba pronto porque sino no nos aguantaríamos ni nosotros mismos.

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Le gustaba repetir aquello de "estamos aquí una noche más, juntos al calor de la radio". Él era el calor de la radio. Él supo comunicar y conectar con sus oyentes como pocos más han sabido hacerlo. Marcar toda una etapa, y dejar además una huella muy profunda en todos los que le tuvimos cerca.

El encuentro de esta mañana, con Pilar , su madre, Pili, su mujer y Laura y David, sus hijos, ha servido para recordar muchas cosas. Y darnos cuenta de que le seguimos teniendo muy presente.

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Quisiera únicamente, para no eternizarme con estas líneas, reiterar aquí lo que sugerí en ese acto . Creo que la SER debería hacer algo que recuerde a Carlos cada día. He lanzado dos ideas, puede haber otras, pero no estaría de más que el Premio Ondas de Radio llevase su nombre, o creo que más acertado, que la redacción pase a llamarse Redacción Carlos Llamas de los Servicios Informativos. Sería bueno que pudieran verlo así en el rótulo que hay a la entrada las personas que cada día trabajan en la radio. Y que todos recordásemos que un día tuvimos entre nosotros a una persona única, con mucho talento, y que además era divertida. Y sin pretensiones.