Lágrimas en Eibar y Almería
Vascos y andaluces descienden a Segunda División en una última jornada de infarto
Madrid
Se palpaban los nervios. La jornada 38 se avecinaba difícil para cuatro equipos que, además de ganar, debían mantener el oído cerca del transistor para conocer lo que ocurría en el resto de campos. Ese ha sido el caso del Eibar que, tras completar un buen partido y vencer cómodamente por 3-0 a un Córdoba desaparecido, vio su sueño de la permanencia frustrado con el segundo gol del Deportivo en el Camp Nou, que aseguraba el empate y, por tanto, la salvación.
El pitido inicial sonó en Almería, Eibar, Granada y Barcelona como una alarma que alertaba del comienzo de los últimos 90 minutos y la oportunidad definitiva de jugar un año más en Primera. Solo fueron necesarios cinco para que el Depor despertara a la bestia. Leo Messi fue el encargado de abrir los marcadores con un gol temprano que hizo sufrir más de la cuenta al Deportivo.
A partir de ahí, vino todo rodado. El carrusel de partidos dio pie a la victoria anunciada del Eibar en Ipurúa. El capitán Arruabarrena anotó el primer gol de los armeros dando paso a las dos dianas siguientes, un tanto de Raúl Navas y otro de Capa. Parecía verse la luz al final del túnel, la luz de can Barça ganando a un Depor completamente encerrado y a la espera.
Ganando también empezó el Almería, que dio la sorpresa en los Juegos Mediterráneos al adelantarse a un Valencia necesitado de noches de Champions. Los de Nuno no iban a rendirse y menos tras ser aprisionados en la clasificación por el Sevilla, victorioso en Málaga.
El Valencia, por detrás en el marcador durante mucho minutos, igualó el pulso a los andaluces hasta en dos ocasiones. Paco Alcácer marcó el tercero y dejó el 2-3 en el luminoso y al Almería destinado a jugar en Segunda la próxima temporada. Era morir o matar y los muchachos de Barjuan cayeron derrotados pero sin dejar de pelear, sin bajar los brazos.
Una estampa muy diferente se vivió en Granada. El empate les valía tanto como al Atleti para conseguir sendos objetivos y, por lo tanto, no dudaron en protagonizar el "espectáculo" de la jornada con una sola llegada al área. El minuto 90 desató la euforia de los granadinos, que vieron su reto conquistado. El Deportivo, desde Barcelona, pudo aguarle la fiesta en los últimos minutos, ya que un gol más del conjunto deportivista hubiera puesto a los de Sandoval en descenso. Pero ese gol no llegó.
El Deportivo se conformó con su 2-2 y se enamoró del empate hasta que el pitido final hizo brotar las lágrimas de alegría (y de Primera) de un equipo que ha sufrido mucho esta temporada. Messi marcó los dos goles que pudieron mandar al Depor a Segunda, pero Lucas tiró de coraje para anotar el primero y Salomao, en una vuelta gloriosa, puso las tablas al encuentro con un gol que dio la vida a los de Víctor Sánchez del Amo, una vida que se mantendrá en la máxima categoría durante un año más.
Este segundo gol fue el que sentenció al Eibar, que tuvo que esperar a que terminara el encuentro del Camp Nou para conocer su triste realidad. Los chicos de Gaizka Garitano, con una primera vuelta digna de examinar y ese apodo de "equipo revelación", vuelven a Segunda División tan solo un año después de abandonar la categoría.
El Almería también retorna a la categoría de plata dos años después de su último ascenso y lo hace de la mano de otro andaluz, el Córdoba (ya descendido desde hace semanas). Deportivo y Granada, por su parte, celebran sus empates y su lucha, un año más, en la mejor Liga del mundo.