Pedro Sánchez apela a los votantes del PP que se van a Ciudadanos
Con la encuesta del CIS como revulsivo, los socialistas piden a los descontentos con el PP que sienten "vergüenza" por la corrupcion, que contriuyan a la regeneración de España
Madrid
Día 1. Dice Pedro Sánchez que en ganas de ganar no le puede ganar nadie. Para los socialistas, arrancar la campaña con un CIS que debilita el PP es un revulsivo porque confirma, según comentaban en los corrillos del mitin de apertura de campaña de Pedro Sánchez, que el trabajo que se está haciendo se traduce en recuperación para el partido y en consolidación del liderazgo del secretario general.
Pero no es suficiente. Extremadura y Asturias son, según el CIS, las únicas federaciones que obtienen un resultado por encima del 30 por ciento. En Castilla La Mancha, Emiliano García Page tiene expectativas de llevarse por delante a un símbolo del PP, a su secretaria general, María Dolores de Cospedal, pero el PP sigue siendo primera fuerza política en el resto de territorios que renuevan sus parlamentos autonómicos el 24 de mayo.
Ferraz confía en la campaña para dar un salto que les permita superar al PP, al que en sus discursos sitúan como su único adversario. Pedro Sánchez, en su primera oportunidad para pedir el voto, llamó a quienes han apoyado al PP en las últimas convocatorias y que se avergüenzan ahora de la corrupción instalada en el partido.
La regeneración que necesita España, dijo, no la puede ofrecer un partido que no se regenera a sí mismo. Así que pidió ayuda a todos esos que dieron las mayorías absolutas al PP desde posiciones de centro y que ahora, según la foto del CIS, tiene previsto entregarse a los brazos del partido de Albert Rivera.
Sánchez no hizo referencia expresa a Ciudadanos pero, en privado, los socialistas admiten que está capitalizando el hartazgo de los votantes y que será decisivo en comunidades como la valenciana o Madrid, donde el PP perdería la hegemonía indiscutible, según el CIS, pero no la mayoría. Fuentes del PSOE consideran que hoy el PP es visto como un partido tóxico y que Ciudadanos no se va arrimar. Evitará, confían los socialistas, contaminarse antes de las elecciones generales.
Entre los militantes, es recibido con alivio el estancamiento de Podemos después de meses de zozobra entre las bases que veían como les pasaban por delante den las encuestas. Bandera en mano, un militante certificaba: "A Podemos ya nos los hemos comido".
No son tan optimistas en el sector crítico del PSOE. Hay quien dice que estar un punto arriba o abajo del PP no puede ser un consuelo. Que el PSOE es un partido de gobierno y que no hay encuesta que le devuelva a esta condición. La campaña dirá. Quedan 14 días.