PP y PSOE arrancan oficialmente su precampaña para mayo
A escasos 300 metros los dos grandes partidos celebran este fin de semana dos macro reuniones para lanzar sus propuestas para las elecciones de mayo. Hoy Rajoy, tras las críticas internas, tratará de ofrecer una imagen de unidad junto a sus candidatos. El PSOE apelará al espíritu del 79: Felipe González clausurará mañana la convención socialista junto a Pedro Sánchez
Madrid
Tras las críticas internas, Mariano Rajoy tratará de ofrecer hoy una imagen de unidad junto a sus candidatos. El presidente del Gobierno se hará la foto con todos ellos y volverá a mostrarles su convicción de que el Partido Popular ganará las elecciones de mayo. Una convocatoria electoral, en la que se va a implicar "a fondo", según nos cuentan desde la Moncloa.
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Muy cerca de la reunión del PP, a unos 300 metros, se celebra también este fin de semana la Convención Municipal del PSOE. Los populares en el Palacio de Congresos. Los socialistas en un pabellón del recinto ferial Ifema.
El PSOE quiere apelar a las primeras elecciones locales, las de 1979, cuando todo era nuevo en un partido que se enfrentaba por primera vez en democracia a las urnas municipales. Para ello, Pedro Sánchez clausurará mañana el encuentro junto a Felipe González.
En el PP, Cospedal y Arenas rivalizan en protagonismo
Ayer, en el arranque de la cita de los populares, la guerra entre Javier Arenas y María Dolores de Cospedal se trasladó a los discursos. Ambos rivalizaron en protagonismo. Los dos pusieron de ejemplo a su partido, frente al resto de formaciones. Pero cada uno lo hacía a su manera. De forma muy distinta. Ninguno citó por su nombre a Ciudadanos o Podemos, pero estaban en la mente de todos.
La secretaria general de los populares defendía que el Partido Popular tiene experiencia, sabe hacer un programa y tiene candidatos conocidos en política. Resaltaba que los suyos tienen nombres y apellidos y que en sus filas se sienten “muy orgullosos” de ellos. A diferencia de otros que según ella se dedican a “hacer filosofía, grandes soflamas, titulares y exposiciones muy brillantes, en programas de televisión y entrevistas”.
En la misma línea se expresaba Arenas. Él solo era moderador de una mesa, pero se esforzó por tener su momento de gloria. Ni Esteban González Pons ni Carlos Floriano, encargados de otros debates, tuvieron tanto protagonismo.
Arenas sí y lo ha hecho gracias a una intervención “muy política”, según han resaltado algunos cargos. Precisamente lo que tanto reclaman en el PP desde la derrota en Andalucía. Su discurso ha gustado más que el de Cospedal. El vicesecretario de Política Autonómica y local aseguraba que el PP ganará en las municipales y autonómicas “con mayorías amplias y suficientes”. Pedía a los suyos que no se crean lo que digan las encuestas porque, al final, los ciudadanos solo tendrán tres opciones entre las que elegir: las reformas del PP, “los experimentos con gaseosa” o un “Zapatero bis”, refiriéndose a Pedro Sánchez. Además, pedía al partido el “máximo esfuerzo” para mayo y para este “año trascendental” en el que el PP se juega “25 años de la historia de España” y también que nuestro país sea “fuerte” en Europa. ”Si alguien quiere ser como Venezuela, allá él”, criticaba. Pero lo que más éxito tuvo fue que Arenas defendiera el “liderazgo” de Mariano Rajoy y lo presentara como “una garantía de cohesión”.
El PSOE se encomienda a una renovación amplia de sus candidatos
Hace cuatro años, en los meses previos a las municipales de 2011, el PSOE diseñó una Conferencia de Política Municipal volcada en la reivindicación de la gestión del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, en aquel momento ya en plena caída en cuanto a niveles de aceptación social. Los candidatos a las alcaldías salieron en todas las fotos de aquella gran cita con el entonces presidente del Gobierno y sus ministros, que dirigieron los debates programáticos en las distintas mesas de trabajo. El resultado tras aquella convocatoria electoral fue demoledor: los votantes endosaron a los munícipes la factura de la gestión de Zapatero y el PSOE fue literalmente barrido de los ayuntamientos. Solo obtuvo la alcaldía de 9 de las 50 capitales y la presidencia de 7 de las 37 diputaciones provinciales.
Ahora, como para borrar las huellas del pasado inmediato, la Conferencia Municipal que celebran los socialistas en Madrid este fin de semana tiene ese planteamiento totalmente diferente. César Luena, en secretario de Organización del PSOE, se encomienda a la renovación profunda de los carteles locales: ocho de cada diez alcaldables se estrenan en la convocatoria del próximo 24 de mayo.
Felipe González será único "ex" reivindicado por la dirección federal en este cónclave. Él ofrecerá un discurso mañana, cuando está prevista también la asistencia de José Luis Rodríguez Zapatero, pero en este caso como invitado. Asistirán dirigentes territoriales, aunque ninguno de ellos subirá a la tribuna.
Es una cumbre municipal y serán los candidatos municipales quienes tengan la voz, a excepción de Ángel Gabilondo, candidato a la Comunidad de Madrid, que como referente de los anfitriones, los socialistas madrileños, también clausura. Y es que si hay una batalla electoral en la que la dirección federal ha puesto empeño en esta precampaña esa es la batalla de Madrid, después de que Pedro Sánchez justificase la constitución de una gestora ante las pésimas expectativas electorales del anterior equipo.
