El Tribunal de Cuentas cambia sus pruebas de acceso para tratar de lograr más transparencia

Madrid

El Tribunal de Cuentas, el organismo encargado de analizar las cuentas de otras Administraciones Públicas, cambia las normas de sus pruebas de acceso para tratar de que sean más transparentes y que permitan la igualdad de oportunidades. El paso lo anticipó el pasado verano el presidente de la institución en una comparecencia parlamentaria, a la que acudió después de “El País” evidenciara prácticas de nepotismo en la selección de personal.

Aquella investigación periodística desveló que 100 de los 700 empleados del Tribunal de Cuentas son familiares o allegados de cargos altos e intermedios y de sindicalistas que trabajan en el organismo. Tras el compromiso en el Parlamento de este verano de tomar medidas para corregir estas prácticas, los cambios en los procesos de selección ahora anunciados afectan a las pruebas para acceder a sus Cuerpos de Letrados y Auditores y al Cuerpo Técnico de Auditoría y Control Externo cuya convocatoria se va a realizar este mismo año.

Las modificaciones son en esencia dos, según anuncia el Tribunal de Cuentas en una nota. En primer lugar, imitar los procesos de selección de cuerpos como el de Abogados del Estado o los Interventores y Auditores del Estado. “Esta modificación supone que la convocatoria del Tribunal está abierta a un mayor número de opositores”, afirma el Tribunal de Cuentas.

El segundo cambio pasa por cambiar la composición de los tribunales calificadores, para que la mayoría de sus siete integrantes sean “funcionarios (catedráticos, magistrados, etc.) que no prestan su servicio dentro del Tribunal de Cuentas y que son elegidos por órganos ajenos” a la propia institución