Gritar "puto" no es grave, dice el seleccionador mexicano

El entrenador de la selección de fútbol mexicano, Miguel Herrero, apoya a su afición ante el anuncio de la FIFA de que abrirá una investigación por "conductas impropias", tras los gritos racistas y homófobos escuchados durante los partidos que ha jugado el conjunto azteca en el Mundial de Brasil. Los aficionados mexicanos gritaron "puto" insistentemente durante el partido contra Brasil, cada vez que el portero Julio César tenía el balón en sus manos. También profirieron gritos racistas contra los jugadores en el partido contra Camerún. Los aficionados mexicanos durante el partido contra Brasil "No tenemos nada que decir, estamos con la afición, ellos lo hacen para presionar al arquero rival, me parece que no es grave", ha respondido a los periodistas el entrenador mexicano. La FIFA ha abierto la investigación por los "insultos anti LGTB" (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales) vertidos en el partido jugado en Fortaleza, uno de los primeros del Mundial. El director de selecciones nacionales, Héctor González Iñárritu, ha añadido más argumentos a lo dicho por el entrenador. "Es una expresión normal que se ha hecho una costumbre en el fútbol mexicano" ha dicho, para concluir impertérrito: "Ni mucho menos se trata de un grito de homofobia. Cada fútbol tiene sus costumbres y esa es una de las nuestras". Para contestar a la complacencia de los responsables de la selección mexicana, la "selección gay" de México ha dado un paso al frente. "Es obvio (que "puto") es una palabra que se usa para denigrar a la población de la diversidad sexual" denuncia el futbolista Andoni Bello, capitán y creador del llamado Tri Gay. Bello, que creó la selección gay de México para luchar contra la discriminación, considera oscurantista y homofóbica a la Federación Mexicana de Fútbol. La CONAPRED (Comisión Nacional para Prevenir la Discriminación) ya ha pedido en otras ocasiones a la Federación Mexicana que acabe con los gritos discriminatorios de los aficionados. México es un país con un alto grado de homofobia.La diversidad sexual es motivo habitual de discriminación y, en no pocas veces, de asesinato. La unión civil entre personas del mismo sexo es legal en la ciudad de México, pero no goza de la simpatía de la mayoría de la población, sea en la capital o en el resto del país.