La justicia alemana da el visto bueno a un sueldo de 1,5 euros a la hora
El Tribunal de Trabajo de Cottbus desestima la demanda de una Oficina de Empleo que acusaba a un bufete de abogados de explotación laboral por pagar a dos de sus empleados 1,54 y 1,65 euros la hora de trabajo
La justicia alemana ha dictado sentencia a favor de un bufete de abogados que pagaba a dos de sus empleados 1,54 y 1,65 euros la hora de trabajo. El fallo ha sido recibido con gran sorpresa en el país teutón ya que, a priori, su caso tenía todas las papeletas para ser considerado como una práctica de 'dumping salarial'.
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El tribunal entiende que el empresario no explotó a los empleados porque ellos conocían las condiciones de trabajo en el momento de incorporarse a su puesto y porque además los dos empleados recibían por parte del Estado prestaciones sociales para poder llegar a fin de mes. Además, en la sentencia precisó que los empleados habían aceptado el trabajo siendo conocedores de la remuneración que percibirían y con la intención de entrar en el mercado laboral, sin que esta situación hubiese supuesto ninguna ventaja económica para el empresario. En este sentido, el juez ha destacado que la contratación no era necesaria para el empresario, quien ya contaba con seis empleados a tiempo completo.
La oficina de empleo de Oberspreewald-Lausitz había denunciado la situación en la que se encontraban los trabajadores y pedía que el dueño del bufete devolviese al Estado los 4.100 euros que los trabajadores recibieron en concepto de ayudas. "El veredicto ha sido totalmente inesperado e incomprensible para nosotros", ha declarado la directora gerente de la oficina de empleo Brigitta Kose. A su entender, la sentencia sienta un mal precedente para otros empleadores que ahora pueden utilizar el fallo como argumento para contratar a nuevos empleados pagando salarios bajos alegando simplemente que no necesitan a ese trabajador en concreto.
El dictamen se ha dado a conocer el mismo día en que destacados institutos económicos de Alemania han advertido que el país perderá 200.000 empleos con la instauración, el próximo año, del salario mínimo de 8,5 euros a la hora. Este cambio normativo que ha impulsado la gran coalición por iniciativa de los socialdemócratas, ha creado gran polémica en Alemania sobre todo entre los empresarios, quienes aseguran que se verán forzados a reducir puestos de trabajo al tener que pagar honorarios tan altos. Hasta ahora no existía un salario mínimo en el país por lo que era habitual que los empresarios pagaran sueldos bajos a los empleados y estos se viesen forzados a complementar sus ingresos acudiendo a las ayudas del Estado para poder llegar a fin de mes.
