Diez años sin Marco Pantani

Marco Pantani empezó a morirse el 5 de junio de 1999. Ese día, a las 7 de la mañana, irrumpieron a golpetazos en su habitación en Madonna di Campiglio, en la víspera del final de un Giro de Italia que dominaba con aplastante superioridad. Quedaba expulsado de la prueba por hematocrito alto (52%). "Para decirlo claramente se hundió todo aquello que se había creado en el 98, en el 97, en el 95. Todo se hundió allí", aseguraría en una entrevista en El País. Comenzó así una caída a un infierno personal que le sumió en diversas adicciones y crisis depresivas

Le llamaban El Pirata, más allá que por su figura de corsario con bandana, por la capacidad revulsiva que tenía en cualquier pelotón. Era todo lo contrario a un ciclista ortodoxo. Pantani ofrecía espectáculo, esa magia que cualquier aficionado al ciclismo reclamaba y por la que le convirtieron en héroe. Llegó al ciclismo en 1993 y su nombre empezó a sonar con fuerza en 1994 cuando ganó dos etapas en el Giro de Italia, con finales en Merano y Aprica. Pero en 1995 sufrió el accidente más grave de su carrera deportiva, al ser arrollado en el descenso de Pino Torinese por un coche que circulaba en dirección contraria. Pocos creían en su recuperación pero volvió más fuerte que nunca. Así logró su histórico doblete Giro-Tour del 98, por el que un italiano volvió a enfundarse el maillot 46 años después de lo que lo lograra Fausto Cop. Fue el Tour maldito del caso Festina.

Tras el escándalo del Giro de 1999 anunció su regreso. "Volvamos a hablar de bicicletas. Demostraré que ando tan fuerte o más que antes", aseguró. Pero poco se habló de las mismas. Se habló más de su travesía de tribunal en tribunal, de sus acusaciones por "fraude deportivo", o la del Comité Olímpico Italiano que pidió un año de suspensión para el corredor por el uso de insulina en el Giro del 2001.

El 14 de febrero del 2004 su cuerpo fue encontrado en el hotel de tres estrellas la Rose de Rimini. Estaba solo, sin equipaje ni teléfono móvil. Encima de la cómoda apareció un cóctel de ansiolíticos, medicamentos y antidepresivos. Las causas de la muerte, según el forense Giuseppe Fortuni, fueron un edema pulmonar y cerebral, provocado por la ingesta de cocaína y medicamentos, si bien se descartó la hipótesis del suicidio.

Tras su muerte siguieron los escándalos. En el año 2007 un informe de investigación revelado por la Comisión Antidopaje del Senado francés asoció el nombre de Pantani, junto con el de otros ciclistas, con varios positivos por EPO, resultado de unos análisis de muestras de 2004. El propio Pantani aseguró en una entrevista en 1997: "Subo tan rápido para dejar antes de sufrir". No sabía entonces que su propia frase sería la mejor definición de toda su vida.

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