Cine y TV | Ocio y cultura

'Bienvenidos al Lolita' y la señora de Cuenca

La nueva serie de Antena 3, estrenada con éxito de audiencia, evidenció bastantes lagunas y desencantó a la crítica

Rodrigo Guirao es Jota en 'Bienvenidos al Lolita'

En Antena 3 y Globomedia -productora y madre de la criatura- deben estar contentas tras conocer que el primer capítulo de su serie 'Bienvenidos al Lolito' fue lo más visto de este martes con una media de 3.551.000 espectadores y una cuota de pantalla del 18,4%. Sin embargo, mucho debe mejorar esta ficción si no quiere ver descender esos números en los siguientes capítulos.

Más información

Durante la emisión del primer capítulo de 'Bienvenidos al Lolita' este martes, fue frecuente ver en redes sociales a críticos televisivos y guionistas hablar de la señora de Cuenca. Esta expresión -muy usada en el gremio de guionistas de televisión- alude a que las series que se piden en España deben gustar a toda la familia, sus tramas las debe entender "hasta la señora de Cuenca". Como escribe Javier Olivares, creador y guionista de series, esta expresión, en boca de directivos de televisión, suele significar: "no te pases de intelectual, tío listo, que debemos tener audiencia".

'Bienvenidos al Lolita', por lo visto en su primer episodio, es exactamente la serie que busca desesperadamente a la señora de Cuenca. Una ficción con una producción que deja mucho que desear, unos decorados más propios de una serie de finales de los 90 y unos exteriores que se reducen una calle trasera de Gran Vía. Sí, se pueden hacer excelentes series sin grabar en exteriores; pero si optas por esta opción no lo hagas para acentuar tu falta de recursos o de originalidad. Y este es uno de los errores más graves en 'Bienvenidos al Lolita', el evidenciar demasiado las cosas que se han hecho mal.

Pobre nivel interpretativo

Llena de tópicos tanto en sus tramas como en sus personajes, todos ellos carentes de interés por pobreza en el guion y por estar en manos de un reparto de actores bastante cuestionable. El gallego inseguro, indeciso y al que le ocurren todas las desgracias. Una andaluza enamorada de la juerga, el baile y con una actitud positivísima ante la vida. El argentino de treinta y pocos cuyas miradas derretirían a cualquier mujer del mundo. Por supuesto, este argentino apareció en más secuencias sin camiseta que con ella. El susodicho, Rodrigo Guirao, modelo y actor argentino que debutó en 'Rebelde Way' y que por lo visto en 'Bienvenidos al Lolita' desentona mucho menos con la primera de las profesiones.

En líneas generales, el nivel interpretativo ofrecido por la serie de Antena 3 fue muy pobre. Se salvan mínimamente Luis Varela, Carlos Santos y Beatriz Carvajal. Chicas monísimas, guapetones como el mencionado Guirao o Pablo Espinosa, procedente de la juvenil y exitosa serie de Disney 'Violetta', y algunos secundarios más completan el reparto de esta serie. Sorpresas, para mal, de algunos actores y actrices que han destacado en otros de sus trabajos como Jorge Bosch y, especialmente, Nerea Camacho. Ganadora de un Goya por su papel protagonista en la película 'Camino', Nerea no ha acertado con los proyectos sucesivos. De aparecer como secundaria en las insustanciales películas de la saga 'A tres metros sobre el cielo' a participar en algún capitular de series como 'El barco'. Más debía haber ambicionado una actriz como ella.

En 'Bienvenidos al Lolita', la interpretación de Nerea es de una candidez que roza lo exasperante.

Tramas manidas, tópicas e insulsas

El capítulo empieza con una novia que deja plantada al gallego -cómo no- y con el personaje de Nerea (Greta), una adolescente enamorada del argentino guapetón cortándose las venas en el baño. A partir de ahí comienza una sucesión inacabable y tediosa de ridículas situaciones que o bien pretenden situar al espectador y presentarle a los personajes, o bien hacerle reír o bien emocionarlo. No consigue nada de lo que busca.

De fondo, la supuesta trama que articula la serie: un cabaret mítico del centro de Madrid que ahora está en sus horas más bajas esperando la llegada de un nuevo socio salvador (Luis Varela) dispuesto a inyectarle dinero. Sin ese dinero, deberá cerrar, lo que supondría la pérdida de su empleo y forma de vida a la dueña (Beatriz Carvajal), sus bailarinas, sus camareros y demás gentecilla que vive ahí. ¿De qué viven si al cabaret ya no va nadie? No lo sabemos ni nos lo cuentan. La cosa es que en la parte superior del Lolita -al más puro estilo de 'Hostal Royal Manzanares' viven ciento y la madre-, como una pequeña gran familia.

En 'Bienvenidos al Lolita' hallamos una mezcla adolescente de culebrón y anuncios de perfume baratos. El primer episodio nos dejó varias secuencias de amoríos fallidos, con sus tensiones sexuales no resueltas, grabadas como el peor de los culebrones (melenas al aire, zoom a unas miradas de enamoramiento, música romántica de fondo...) y con una voz en off más propia de un spot publicitario de colonias que de una ficción.

Para dar gusto a la señora de Cuenca,Álex Pina, el creador de la serie y uno de los guionistas más importantes de Globomedia (creador también de series como 'El Barco', 'Los hombres de Paco', 'Los Serrano'...) decidió coger todos los tópicos que ya hemos visto hasta la saciedad en las series "para toda la familia". Para los adolescentes, actores guapos, amores imposibles y música. Para los más adultos, continuas referencias a la situación económica y social que vive España. Para los mayores de la casa, el personaje de Beatriz Carvajal, con toda una vida dedicada a ese cabaret. y que ve volver a su hija (Natalia Verbeke) e intenta zanjar disputas pasadas. ¡Qué bien suele funcionar el sentimentalismo vacío!

El capítulo 1 de 'Bienvenidos al Lolita' mantuvo una especie de obsesión por presentarle al espectador cada personaje y su breve historia personal, lo que daba lugar a escenas absurdas en las que dos personajes se recordaban palabra por palabra lo que se habían dicho años antes, sólo para que el espectador supiera por qué estos dos personajes habían discutido.

A esto añádanle, en este primer episodio, dos intentos de suicidio fallidos, un transexual (interpretado por Sara Vega que se supone que es un hombre) al que un crío pilla meando de pie en el aseo de tíos, varias tomas del buenorro argentino en moto y con chupa de cuero, un empresario desalmado, varias amenazas de desahucios, un entusiasta coreógrafo que agarra que se pone delante de una cámara de informativos y lanza un mensaje de esperanza a toda España y un par de números de cabaret que convirtieron a 'UPA Dance' en un monumento al arte de la danza.

Éxito de audiencia

Todo esto debió gustarle a la señora de Cuenca habida cuenta de la audiencia conseguida. 'Bienvenidos al Lolita' fue primera opción en todos los públicos, destacando especialmente entre los adolescentes:

De 4 a 12 años: 17%

De 13 a 24 años: 24,7%

De 25 a 34 años: 17,9%

De 35 a 44 años: 17%

De 45-54 años: 20,7%

De 55 a 64 años: 19,4%

Mayores de 65 años: 15,5%

Por comunidades, fue líder en Cataluña (15%), Madrid (23,7%), Valencia (24,7%), Castilla-La Mancha (23,4%), Canarias (12,9%), Aragón (30,8%) y Castilla y León (23%).

Si miramos a la competencia, en su franja de emisión, 'Bienvenidos al Lolita' lideró con comodidad con un 18,4% por el 10,5% de Telecinco con 'Tierra de Lobos' y el 13,9% de La 1 con la película 'Plan oculto'.

Cierto es que buena parte de este éxito se debe a la fenomenal campaña de promoción de la serie. Antena 3 llevaba varios días con amplísimos resúmenes y avances. También el martes es un buen día para estrenar una serie pues no hay grandes cocos. Antena 3 lo hizo este mes de septiembre con 'Vive cantando' -serie modesta y más decente- y le funcionó. Ahora 'Bienvenidos al Lolita' toma el relevo. Otra serie que, quizá en el prime time de otro día se hundiría. O no. La última respuesta en la ficción televisiva española, como siempre, parece tenerla la señora de Cuenca.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00