Van Rompuy y Barroso celebran el "importante" acuerdo con Irán

El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, han celebrado el acuerdo preliminar alcanzado entre el 5+1 e Irán en Ginebra tras cuatro días de negociaciones maratonianas para tratar de resolver el escollo internacional que representa el programa nuclear iraní y han reclamado su aplicación para dar garantías a la comunidad internacional sobre su naturaleza exclusivamente pacífica.

Van Rompuy ha considerado que el acuerdo es "un paso importante tanto para Irán como para el resto de la comunidad internacional" para lograr "garantías" de su "naturaleza pacífica", un punto que si se abordar "eficazmente" tendrá "una efecto significativa regional y global"

"Reducirá las tensiones políticas, contribuirá a construir confianza y apoyará la promoción de la no proliferación de armas de destrucción masiva", ha asegurado el dirigente comunitario, quien ha considerado que "este primer paso" pactado "demuestra el compromiso y valentía de todas las partes", incluido del recién elegido presidente iraní, Hassan Rohani.

Van Rompuy ha elogiado los esfuerzos de "todos" para lograr el acuerdo pero ha dejado claro que "ahora es crucial garantizar la aplicación puntual del acuerdo alcanzado y continuar trabajando, en base a la confianza que se ha construido, hacia un acuerdo definitivo de esta cuestión".

El jefe del Ejecutivo comunitario ha considerado por su parte que el acuerdo alcanzado en Ginebra constituye "un hito enorme para la seguridad y la estabilidad mundiales" y ha considerado que "este logro también es el resultado de la política de doble vía de la UE (diálogo y sanciones) y un testimonio real de nuestro apoyo a la estabilidad regional y global".

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"Ahora es importante que todas las partes continúen a cooperar en un espíritu constructivo en la aplicación del acuerdo para que garantías claras puedan darse a la comunidad internacional sobre la naturaleza pacífica y civil del programa nuclear de Irán, así como la plena cooperación con la AIEA", ha subrayado Barroso en un comunicado.

Ambos han querido elogiar a la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, que ha negociado en nombre del 5+1 con Irán.

Van Rompuy ha asegurado que Ashton tuvo un papel "crucial" y "su dedicación y perseverancia han sido claves para mediar este primer acuerdo", mientras que Barroso le ha felicitado por "este logro, que es el resultado de su implicación sin descanso y dedicación a la cuestión en los últimos cuatro años".

En virtud del acuerdo, cuyos elementos han sido dados a conocer por la Casa Blanca, Irán se ha comprometido entre otros a detener el enriquecimiento de uranio por encima del 5% y a desmantelar las conexiones técnicas necesarias para enriquecer uranio por encima de este porcentaje, así como a neutralizar su almacén de uranio enriquecido cerca del 20%, diluirlo hasta por debajo del cinco por ciento o convertirlo a una forma no apta para el mayor enriquecimiento.

Asimismo, Teherán se ha comprometido a detener el avance de su capacidad de enriquecimiento de uranio, comprometiéndose a no instalar nuevas centrifugadoras de ningún tipo, a dejar inoperativa la mitad de las centrifugadoras en la central nuclear de Natanz y tres cuartas partes de las instaladas en Fordow y a detener cualquier tipo de actividad en el reactor de agua pesada en Arak. Teherán también se compromete a dar acceso a los inspectores de la AIEA.

Irán ha obtenido por su parte la suspensión de "ciertas sanciones" referentes al oro y a los metales preciosos, al sector automovilístico y a las exportaciones petroquímicas y se permitirá la adquisición de petróleo iraní aunque todavía de forma limitada, entre otros. Tampoco se impondrán nuevas sanciones contra Irán por su programa nuclear en los próximos seis meses si Teherán cumple con sus compromisos.