El Banco de España avanza el fin de la recesión económica
El supervisor bancario estima que la economía española creció un 0,1% en el tercer trimestre
El Banco de España ha certificado que la economía creció un 0,1% en el tercer trimestre, tras encadenar nueve trimestres de caídas. Sin embargo, el retroceso del Producto Interior Bruto (PIB) en términos interanuales alcanza el -1,2%, lo que hará que cuando termine 2013 la economía habrá decrecido pese a esta leve mejora del tercer trimestre. Ese 0,1% de avance viene aupado por la demanda exterior, las exportaciones, con una contribución al PIB del 0,4%. Continúa lastrando a nuestra economía el descenso de la demanda interna, es decir, la actividad interna del país, que bajó un 0,3%, lo mismo que en el segundo trimestre.
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El organismo dirigido por Luis Linde contextualiza la recuperación del tercer trimestre explicando en su boletín económico de octubre que la economía española prolongó la mejora gradual que se viene observando desde principios de año, "en un entorno caracterizado por un cierto alivio en las tensiones financieras y la mejora de la confianza".
Además del crecimiento del PIB (que tendría que ser confirmado por el dato avanzado del INE el próximo día 30), habla del empleo, que "moderó sustancialmente su ritmo de descenso en este periodo", cayendo sólo un 0,1% intertrimestral (aunque la caída es del 3,1% interanual), lo que, "de confirmarse, representaría la tasa menos desfavorable desde el inicio de la crisis". Eso sí, la contención salarial habría proseguido.
También reconoce el Banco de España que la traslación de esta mejoría a las condiciones de financiación del sector privado no financiero está siendo "limitada", tal y como muestran los tipos de interés del crédito concedido a familias y empresas, que "permanecen en niveles muy elevados".
El consumo de los hogares, por su parte, pasa del estancamiento en el segundo trimestre a subir el 0,1% en el tercero. Con todo, "el bajo nivel de renta, las todavía desfavorables perspectivas del mercado laboral y el elevado endeudamiento de las familias no permiten prever una recuperación sensible del consumo a corto plazo", recoge el boletín.
Seguirá cayendo a su vez la compra de viviendas, a un ritmo similar al del primer semestre, a pesar del "notable" repunte de las compras de inmuebles por parte de ciudadanos no residentes. Sobre los españoles pesan especialmente las "estrictas" condiciones financieras y el "esfuerzo" que requiere la adquisición de una vivienda.
