Susana Díaz marca perfil propio en Madrid

"Tengo 38 años", ha dicho Susana Díaz, como si al desvelar su edad quisiera hacer entender al auditorio que pertenece a una nueva generación que toma distancia. Eso es lo que ha hecho en un desayuno informativo en Madrid al atribuir a Zapatero parte de la culpa de la situación actual de Cataluña: "No fue un acierto afirmar que aceptaría cualquier texto del Estatut". Era su primer gran acto político en la capital y acudió a escucharla la plana mayor del PSOE.

Bastaba con ver la concurrencia para darse cuenta de la expectación que ha generado Susana Díaz, la persona que ahora mismo tiene más poder institucional en el PSOE. Expectación y extrañeza porque, para empezar, no la ha presentado Rubalcaba. Prefirió -"con sorpresa de los organizadores"- que lo hiciera el periodista Manuel Campo Vidal como representante de la "sociedad civil".

Díaz ha expuesto en Madrid su ideario y, sin citar el caso de los ERE, ha anunciado que la semana que viene planteará en su encuentro con Mariano Rajoy un pacto contra la corrupción. Ha preferido no agitar el debate de las primarias en su partido, que es lo que algunos esperaban que hiciera, y se ha centrado en lanzar sus propias propuestas para el PSOE marcando perfil propio.

Primero ha criticado la precipitación del Gobierno de Zapatero al hablar de "brotes verdes". Y después ha reprochado al expresidente aquella frase que lanzó en pleno mitin en el Palau Sant Jordi: "Apoyaré la reforma del Estatut que apruebe el Parlament de Cataluña". "Tenemos parte de culpa", ha dicho después, y ha lamentado, igualmente, la "catalanofobia" del PP durante la reforma estatutaria.

Ferraz sostiene que no les molesta esa frase de Susana Díaz porque muchos, en privado, piensan que Zapatero se equivocó aquel día. La verdad, sin embargo, es que ha sido Díaz la primera en decirlo en alto. Con lo que no están de acuerdo en la dirección socialista es con que Zapatero tenga en eso la misma culpa que el PP, porque el partido de Rajoy desplegó "una campaña contra los catalanes que incluía recogida de firmas". Después del desayuno, algunos barones celebraran que, en este momento de debate en el PSOE, emerjan liderazgos jóvenes. "Ha nacido una estrella", ha llegado a decir el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch. "Ella ha venido a Madrid a presentarse, no a postularse", interpretaban en Ferraz.

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El que ha preferido no hablar ha sido Pere Navarro, primer secretario del PSC y presente en el desayuno. La presidenta de la Junta le ha advertido de que el derecho a decidir que él defiende "no existe" y "es una trampa". "Nos queda trabajo aún por hacer con el PSOE", decían en el entorno de Navarro, que ha aprovechado las horas previas y posteriores al desayuno para explicar su posición en varias reuniones.