Cuelgan el retrato de Dívar en la sala de gobierno del Supremo

El cuadro del expresidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Dívar, ya está colgado en la sala de gobierno del alto tribunal. El acto, que ha presidido el actual presidente Gonzalo Moliner, ha estado marcado por el oscurantismo. No ha habido convocatoria oficial y solo han acudido un puñado de invitados. Entre ellos, Jerónimo Escorial, el que fuera asesor y jefe de seguridad de Dívar y que le acompañaba en aquellos viajes a Puerto Banús que no pudo justificar íntegramente y que le forzaron a dimitir.

El Tribunal Supremo ha cumplido con la tradición y ha colgado el retrato del último presidente del Tribunal Supremo y del Consejo del Poder Judicial, Carlos Dívar, en la sala de gobierno del alto tribunal.

A diferencia del resto de expresidentes, el acto ha sido privado sin convocatoria para los medios de comunicación y solo han asistido un puñado de invitados que han acompañado a Carlos Dívar y a su sucesor, Gonzalo Moliner, encargado de presidir el encuentro. Entre los invitados se encontraba el que fuera asesor y escolta personal de Dívar, Jerónimo Escorial, una antigua secretaria y otro de sus asesores en su etapa al frente del Poder Judicial, Carlos Blanco. La obra del pintor José María Martín Sanz muestra a un Carlos Dívar sonriente enfundado en su toga.

Dívar dimitió de su cargo después de que el diario 'El País' revelara que había cargado a las arcas públicas 32 viajes de fin de semana, muchos de ellos a Puerto Banús, que costaron 28.000 euros. Finalmente el dinero que tuvo que reintegrar al Estado se redujo a 3.000 euros que fue la cifra que el Tribunal de Cuentas consideró que no se había justificado debidamente. Muchos de esos gastos se correspondieron con cenas en restaurantes de lujo con su jefe de escoltas, según publicó el citado diario. El vocal José Manuel Gómez Benítez denunció los hechos ante la fiscalía que terminó archivando la causa.