No se refiere a nadie ni a nada, no afirma ni desmiente, pero Esperanza Aguirre parece elegir muy bien qué dice y cuándo. Y eso sí, siempre en momentos especialmente delicados para el Partido Popular. Dicen que las palabras se las lleva el viento, pero en el caso de Esperanza Aguirre, no. La expresidenta de Madrid es aficionada a lanzar mensajes sin destinatario, tanto desde sus perfiles en redes sociales como en persona, y eso sí con cámaras delante o en las redes sociales. Hoy no ha sido una excepción. Si esta mañana nos sorprendía con un mensaje en su cuenta de Twitter Minutos más tarde lo hacía ante los medios. Al ser preguntada por si era la única de su partido crítica con la gestión. Sus palabras exactas han sido: «Lealtad es decir la verdad». Difíciles de refutar, desde luego. Pero, ¿cómo las debemos interpretar? Lo cierto es que no es la primera vez que Aguirre se convierte en protagonista de la información de actualidad por la ambigüedad de sus palabras en momentos clave, normalmente, un tanto delicados para su partido. Sin ir más lejos, la semana pasada, el día diez de julio hizo públicas algunas de estas reflexiones sin precisar a qué se refería. Tambien utilizó la red social para contar que fichaba por una empresa privada, para comentar los distintos temas de actualidad como las elecciones vascas, o para mostrar su apoyo a Olvido Hormigos, tras la polémica que protagonizó al hacerse público un video íntimo.