Europa, ¿símbolo de esperanza?

No es la primera vez que un europeo recibe el Nobel de la paz, Willy Brandt lo obtuvo en 1971, Lech Wallesa en 1983, Mathi Athissari el año 2008. Pero si la primera que el Premio Nobel intenta conjurar los riesgos de una crisis "sin precedentes" para el proyecto europeo. Porque "la realidad es que nunca tuvimos que enfrentarnos a una crisis de esta magnitud y para la que la Unión carece de instrumentos", ha reiterado en Oslo el Presidente de la Comisión Durao Barroso, silenciando que desde el año 2010, al iniciarse la crisis griega, la Union mantiene un duro pulso con Berlín sobre este tema.

En la práctica, Barroso espera que en el Consejo Europeo de este próximo jueves y viernes, Berlin acepte un supervisor único para los bancos de la Union Europea, función que ejercerá el BCE a cuyas normas van a quedar supeditados todos los Supervisores Bancarios Nacionales. Un primer paso para un Fondo de Resolución y base de un proyecto de presupuesto de los países euro al que se supedita una futura política de crecimiento.Y aunque muchas de las propuestas que están sobre la mesa no pasaran del nivel de proyectos, Berlin debe decir que sí esta semana al supervisor único.

Pero como se desconoce si los acuerdos técnicos podrán contrarrestar las desconfianzas entre gobiernos y los miedos que provoca la crisis sobre los ciudadanos, los discursos del Nobel se centran en recordar la historia hasta el punto que el presidente del Europarlamento ha difundido un vídeo, grabado previamente a su viaje a Oslo, en el que explica que su "compromiso" europeo se inició tras un intercambio como estudiante con niños franceses cuyos padres habían pertenecido a la resistencia contra Alemania. Una forma subliminal de recordar los horrores del nazismo y de la Segunda Guerra Mundial.

Y es que el paro, del que no se habla en Oslo, la deuda que no puede pagarse y el déficit que aumenta con tanta austeridad son elementos que podrían minar el modelo social que ha permitido a Europa vivir en paz aunque Van Rompuy cree que de esta crisis "la Unión saldrá fortalecida para volver a ser un símbolo de esperanza".