Blanca Portillo gana el Premio Nacional de Teatro 2012 por "su compromiso y valentía"

El jurado de este premio ha destacado "su valentía al asumir nuevos retos escénicos y su defensa del teatro como compromiso con la sociedad", en una temporada en la que ha ganado varios premios Max con la obra que dirige, 'La avería', ha presentado 'Antígona' y tiene en cartel 'La vida es sueño'.

La madrileña Blanca Portillo ha recibido el Premio Nacional de Teatro 2012, que otorga el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte y dotado con 30.000 euros.

Portillo, nacida en 1963, ha desarrollado una prestigiosa trayectoria teatral vinculada a nombres como Tomaz Pandur, con cuyo 'Hamlet' consiguió uno de sus tres Max de interpretación, o a la compañía Animalario, con la que trabajó en "Marat-Sade".

Este premio reconoce también "la amplia y variada trayectoria profesional" de esta actriz y directora, popular también por su trabajo en televisión en la serie 'Siete vidas' o en el cine con 'Volver', con la que ganó el premio de interpretación en Cannes, o 'Siete mesas de billar francés', con la que recibió la Concha de Plata en San Sebastián.

Tras recibir la noticia del premio, la actriz ha asegurado que muchas veces "piensa que lo que hace es una labor muy sorda y silenciosa", pero que tiene "un compromiso con el trabajo", que ama y cree en él, y que de repente, tiene la sensación de que "sirve para algo y que la gente lo percibe y lo ve". Ha dicho que se siente "como una niña pequeña, y ahora más que nunca como la cría que salió de la Escuela de Arte Dramático y que quiere transitar el resto de su vida por este camino".

Únete al canal de WhatsApp de la SER

La actriz considera que éste es "un momento muy especial, en el que la cultura está en una situación muy frágil y delicada". "Parece que nada importa y yo creo que sí importa, siempre lo he creído y seguiré creyéndolo. Trabajaré así y por eso pienso que este premio tiene algo más de especial todavía", ha apuntado

Por último, la actriz (que también ha sido directora del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida) ha reconocido que su faceta como directora de escena cobra en estos momentos de su carrera "un peso enorme". "Siempre me he considerado persona de teatro, aunque lo que mejor sepa hacer es interpretar. Por eso, seguiré dirigiendo y produciendo y metiéndome en los charcos que haga falta para seguir creando proyectos, grupos humanos que cuenten cosas en el escenario. De ahí que dirigir es también muy importante", ha dicho.