Las familias reclaman al Gobierno un fondo urgente para libros y becas de comedor

Las asociaciones de padres de la escuela pública y concertada, que representan a cerca de once millones de familias, trasladan al Gobierno "el profundo malestar" por los recortes y exigen una partida urgente que permita atender necesidades básicas como es la compra de libros de texto y material escolar o sufragar becas de comedor que en muchos casos garantizan la única comida decente al día para miles de niños.

Aparcando sus diferencias ideológicas, CEAPA y la católica CONCAPA, mayoritarias en la escuela pública y la concertada respectivamente, han hecho frente común y, en una petición sin precedentes, han reclamado al Gobierno una partida presupuestaria extraordinaria para afrontar el pago de dos servicios básicos y esenciales: libros de texto y comedores escolares.

En cuanto a los libros, cuyas ayudas han caido entre un 30 y un 50% según las comunidades autónomas, las familias exigen al Gobierno un fondo de bancos de manuales escolares para su reparto en todos los colegios, de modo que ningún niño se quede sin el material necesario para estudiar. También piden más continuidad en los diseños curriculares que eviten tener que cambiar de libros con tanta frecuencia y demandan a las editoriales que recorten sus márgenes de beneficios.

Un tercio de las familias tiene dificultades para pagar los libros o el comedor

En lo relativo a las becas de comedor, igualmente recortadas en la gran mayoria de las autonomías, los padres exigen al Gobierno una partida presupuestaria urgente y extraordinaria para las familias con menos recursos. "En muchos casos, se trata de la única comida decente que hacen al día miles de niños en España. Y hay familias desesperadas porque ya no pueden pagar los comedores escolares. La alternativa del tupper no es una solución y menos cuando además hay comunidades que pretenden cobrar también a las familias que tengan que recurrir a la tartera", explica Luis Carbonell, presidente de CEAPA.

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Ambas organizaciones alertan sobre el hecho de que con la excusa del ahorro, la administración puede acabar generando una cadena de problemas organizativos, nutricionales o sanitarios en los comedores escolares que nadie parece haber tenido en cuenta.

"En la práctica, estos recortes están vulnerando el precepto legal que consagra en España la gratuidad de la educación entre los 6 y los 16 años", añade Jesús María Sánchez, presidente de Ceapa. "Y tenemos que recordar que según el último informe de Unicef en España hay dos millones de niños cuyas familias viven bajo el umbral de la pobreza".

"¿Qué sentido tiene hablar de reforma educativa cuando no hay ni dinero para comprar libros?"

Ambas organizaciones han denunciado el caos, la improvisación y la negligencia de las autoridades educativas en el inicio del curso y recuerdan que el ministerio de Educación ni siquiera les ha respondido a la carta que CONCAPA remitió al ministro Wert el pasado 14 de junio para pedir que se abordara con urgencia el asunto de las becas de comedor y libros de texto. "Resulta un sinsentido hablar de proyectos de reforma educativa, cuando las familias no tienen solucionadas cuestiones mucho más urgentes y perentorias como que sus hijos puedan comer en el colegio o tener libros para estudiar en clase", remacha Carbonell.