Los médicos de urgencias auguran problemas a partir de septiembre
Los servicios de urgencias realizan 26 millones de asistencias cada año
Dentro de quince días los extranjeros irregulares, que viven en nuestro país, perderán la tarjeta sanitaria. Se quedarán sin cobertura médica salvo excepciones como las urgencias. Los médicos son conscientes de que van a ver como aumenta su carga laboral sin que aumenten los recursos de que disponen.
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Tomás Toranzo, presidente de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias, no duda de que habrá conflictos. "Todas esas personas", dice "que no van a poder acudir, como hacían antes, al resto de recursos del Sistema Nacional de Salud pues, ante cualquier duda o tan pronto se encuentren mal, van a ir al sitio donde primero se les va atender y luego se les va a preguntar si tienen derecho o si tienen tarjeta sanitaria", explica Toranzo a la Cadena SER.
Pero el incremento en el número de visitas a urgencias (realizan más de 26 millones de asistencias al año) no es el único problema con el que este servicio se va a encontrar a partir del 1 de septiembre. ¿A donde les van a enviar para que les hagan un seguimiento del tratamiento? ¿Y que van a hacer si el afectado padece un patología grave pero no urgente?
La pasada semana, el director general de la Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, Agustín Rivero, dijo que "Los inmigrantes en situación irregular que sean enfermos crónicos serán atendidos por la Sanidad Pública cuando el médico estime que se trata de una urgencia o que no recibir el tratamiento suponga un riesgo vital para su salud". Según Toranzo, "El médico de urgencias bastante va a tener con explicarles, por escrito, lo que tienen que hacer". "Les indicaremos el tratamiento, y les recordaremos que otro médico o un especialista les tienen que hacer seguimiento de su enfermedad, pero que no esperen que seamos nosotros los que tomemos la decisión de si se les da tratamiento o no. Será la Administración la que decida.
Toranzo considera que el Ministerio de Sanidad está echando sobre la espalda de la "urgencia" un problema administrativo que ellos ni pueden ni saben cómo resolver.