Y también el marido de Sáenz de Santamaría
El análisis de Sonia Sánchez, jefa de Política de la Cadena SER
El fichaje del marido de Soraya Sáenz de Santamaría por Telefónica ha causado sorpresa. También en el PP. Iván de la Rosa, abogado del Estado en excedencia, salta al sector privado pocos días después de la sonada polémica por las incorporaciones frustradas a Red Eléctrica del marido de María dolores de Cospedal y del hermano de Álvaro Nadal, uno de los hombres más cercanos a Rajoy, jefe de su Oficina Económica.
En La Moncloa no quieren, de momento, hacer comentarios sobre el fichaje de Iván de la Rosa, argumentando que son "temas personales" de la vicepresidenta. Pero la contratación de su marido parece algo más que eso.
Es cierto que no es lo mismo Red Eléctrica, una empresa participada por el Estado, que Telefónica, que es privada... Aunque cierto es también que Telefónica no es exactamente una empresa privada como las demás.
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La coincidencia en todos los casos que han hecho saltar las alarmas (el marido de Sáenz de Santamaría, el esposo y el hermano de Cospedal o el cuñado de Cañete) es precisamente lo que les hace tan poco éticos: que son nombramientos que se producen a raíz de la victoria del PP en las elecciones generales, justo cuando sus familiares tienen posiciones e influencia privilegiadas.
En cuanto a Telefonica, la empresa deja clara su habilidad para fichar en todos los círculos del poder. Acaba de contratar también a la esposa del diputado Eduardo Madina y en su nómina están también el yerno del Rey Iñaki Urdangarín, la esposa de Rajoy (ahora en excedencia), el íntimo amigo de Zapatero, Javier de Paz, o el ex ministro Eduardo Zaplana.
