El Supremo archiva la querella contra Garzón por los cursos en la Universidad de Nueva York

El Tribunal Supremo ha estimado el recurso de la Fiscalía y ha archivado la causa abierta contra el juez Baltasar Garzón por un presunto delito de cohecho impropio cometido al impartir unos cursos en la Universidad de Nueva York, patrocinados por empresas españolas. El alto tribunal declara prescrito el delito. La acusación popular anuncia que presentará recurso directamente ante la sala de lo penal.

El magistrado del Tribunal Supremo Manuel Marchena ha archivado, por prescripción, la causa abierta a Baltasar Garzón por un supuesto delito de cohecho impropio al haber impartido unos cursos en la Universidad de Nueva York, patrocinados por importantes empresas españolas.

Marchena estima el recurso del fiscal que instaba el sobreseimiento de la causa con el argumento de que la querella admitida a trámite por el Supremo se refería a delitos de prevaricación y cohecho pero que una vez concluida la investigación, sólo se han apreciado indicios de la segunda imputación, que tiene un plazo de prescripción de tres años.

Infringido el deber de abstención

A pesar del archivo, de la lectura del auto se deduce la comisión del hecho delictivo. Marchena recuerda que Baltasar Garzón archivó una querella contra Emilio Botín cuando reingresó en la Audiencia Nacional. El Banco Santander fue una de las entidades que aportó dinero. Al no abstenerse de conocer este asunto, dice la resolución, "infringió conscientemente ese deber en gratitud a la generosa respuesta que había obtenido de esta entidad bancaria a su petición de ayuda económica".

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Con ello, añade, "consideró oportuno ocultar al fiscal y a las partes la concurrencia de una causa que podría perturbar su imparcialidad, demostrando que el deber de agradecimiento generado por la dádiva interfería ya el ejercicio íntegro de su función jurisdiccional".

Marchena concluye advirtiendo que si los testigos hubieran declarado que Baltasar Garzón recibió la ayuda económica de estas empresas en atención al cargo que ocupaba "habría acarreado unas consecuencias jurídicas inmediatas y, con toda seguridad, un desenlace bien distinto"

Habrá recurso

El abogado de Garzón, Enrique Molina, se ha mostrado sorprendido al conocer esta decisión, ya que el archivo se podría haber acordado mucho antes. No obstante, sostiene que el perjuicio a él y a su familia por esta "investigación prospectiva" ya está causado. La acusación popular ha anunciado que recurrirá esta decisión en apelación, directamente ante la sala de lo penal.

Garzón ha conocido la noticia en Colombia, donde está trabajando como asesor para la Organización de los Estados Americanos (OEA).