Detenido en Francia el fundador de la empresa de prótesis mamarias defectuosas

La policía ha arrestado a Jean-Claude Mas, el fundador de la compañía francesa envuelta en un escándalo sanitario internacional por la fabricación de prótesis mamarias defectuosas, en su casa del sur de Francia. Un segundo ejecutivo de la empresa Poly Implant Prothese (PIP) también ha sido detenido este jueves, según fuentes policiales. PIP cerró en marzo de 2010 después de que los reguladores descubrieran que estaba usando silicona no destinada para uso médico en sus implantes. El Gobierno francés ha aconsejado la retirada de esos implantes.

Jean Claude Mas, fundador de la empresa que fabricaba la prótesis mamarias PIP con un gel de silicona no homologado, ha sido detenido esta mañana por la gendarmería en la residencia de su compañera situada en las proximidades de Marsella. Otro ejecutivo de la empresa, en suspensión de pagos desde 2010, habría sido también detenido, según diversas informaciones. La operación policial, que se completa con un registro de la vivienda del empresario ya jubilado, tiene lugar en el marco del procedimiento judicial abierto en octubre pasado por la fiscalía por atentado contra la salud pública. Asimismo, también hay abierta otra investigación judicial por homicidio y lesiones involuntarios.

En sendas declaraciones ante los gendarmes, Mas reconoció que ocultaba deliberadamente a la empresa encargada de controlar el producto que utilizaba el gel industrial no homologado porque "le merecía todas las garantías" sanitarias y rebajaba el precio final del producto. Asimismo, estimó que las mujeres que han presentado una denuncia contra él en virtud de los casos de cáncer detectados en mujeres implantadas pero cuya relación directa con las prótesis PIP no ha sido establecida, "sólo buscan una indemnización económica". El pasado mes de diciembre, las autoridades sanitarias francesas decidieron aconsejar la retirada de los implantes PIP a las mujeres afectadas -unas 30.000 en Francia- y sufragar a través de la seguridad social la operación. Se calcula que en todo el mundo hay más de medio millón de personas que portan este tipo de prótesis fraudulenta.