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Ruiz-Mateos asegura sentirse "orgulloso, feliz y satisfecho" de su obra

El fundador de Nueva Rumasa ha declarado ante el juez en la Audiencia Nacional mputado por los presuntos delitos de estafa e insolvencia punible

El empresario José María Ruiz-Mateos, a su salida de la Audiencia Nacional, en donde leyó un comunicado ante el juez Pablo Ruz, quien le había citado por la presunta estafa a los ahorradores que invirtieron en los pagarés de Nueva Rumasa.(EFE)

El empresario José María Ruiz-Mateos, a su salida de la Audiencia Nacional, en donde leyó un comunicado ante el juez Pablo Ruz, quien le había citado por la presunta estafa a los ahorradores que invirtieron en los pagarés de Nueva Rumasa.

El empresario José María-Ruiz Mateos ha llegado a la Audiencia Nacional a las 9.20 horas para prestar declaración como imputado ante el juez Pablo Ruz por presuntos delitos de estafa e insolvencia punible por su gestión de la compañía.

El patriarca de la familia Ruiz-Mateos, José María Ruiz-Mateos, ha asegurado este martes sentirse "orgulloso, feliz y satisfecho" con su obra, y ha añadido que "volvería a hacer el mismo trabajo" para levantar su grupo empresarial, Nueva Rumasa.

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Tras leer un comunicado ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, Ruiz-Mateos ha reivindicado en unas declaraciones a los periodistas su papel de empresario creador de empleo, aunque ha lamentado la situación de sus trabajadores, algunos de los cuales se han concentrado frente a las puertas del tribunal para abuchear a la familia y exigir responsabilidades penales. "Me he dedicado toda la vida al empleo", ha declarado el patriarca de la familia, quien ha recordado que empezó con siete obreros y ha conseguido emplear a 100.000 personas.

En relación con los abucheos e insultos que ha recibido la familia por parte de los empleados de Nueva Rumasa concentrados en el exterior de la Audiencia Nacional, Ruiz-Mateos ha asegurado que volvería a emplearlos a todos. "Están ahí (fuera) pero en el fondo son buena gente y necesitada", ha añadido.

Durante su breve comparecencia ante el magistrado del Juzgado Central de Instrucción número 5 de Madrid, que ha durado de las 10.30 a las 10.45 horas, Ruiz-Mateos se ha negado a responder a las preguntas de las partes y se ha limitado a leer el comunicado, que ha tildado de "estricto, riguroso, severo, muy en su sitio".

Tras su declaración, ha entrado en la sala su mujer, María Teresa Rivero, quien fuera presidenta del Rayo Vallecano, que también ha comparecido durante tan solo unos minutos ante el juez Pablo Ruz. A continuación, han aparecido los hijos del empresario, Zoilo y Álvaro Ruiz-Mateos, que también han comparecido ante el juez imputados por los mismos delitos. El abogado de la familia ha informado al juez de que los imputados solo iban a contestar a las preguntas de la defensa.

A su salida de la Audiencia Nacional, la Policía ha tenido que proteger tanto a Ruiz-Mateos como a Teresa Rivero, ante los improperios de los inversores y trabajadores, que durante la protesta han gritado consignas como "los hijos a la cárcel y tú a confesarte" (dirigidas a la esposa), "así me veo por culpa de Mateos", "se te tenía que caer la cara de vergüenza" o "devuélvenos nuestro dinero".

 
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