"Todo pasa por Rubalcaba"

Alfredo Pérez Rubalcaba es sin duda la figura política del fin de semana . El viernes conocimos su salida del Gobierno , este sábado las líneas maestras de su programa. Hoy repasamos detalles sobre su liderazgo en el partido y el Gobierno y su forma de trabajar.

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Que esta afirmación es cierta lo pudo comprobar otro ministro, el titular de Trabajo, Valeriano Gómez tras adelantar esta semana que pronto habría novedades sobre la salida de Rubalcaba del Gobierno. Gómez tenía razón, pero eso no evitó un monumental enfado del todavía vicepresidente.

Y es que a Alfredo Pérez Rubalcaba no le gusta que hablen por él, pero sobre todo le molesta que los comentarios e indiscreciones puedan ser utilizados como munición por la derecha política y mediática, según revelan fuentes de su entorno. Por eso se indignó tanto cuando se filtraron sus palabras en el primer acto con militantes en Sevilla el pasado 1 de junio.

¿Cómo es Rubalcaba en las distancias cortas y en el día a día con su equipo?

Alguien que trabaja con él cuenta que Rubalcaba es exigente, ordenado, puntilloso y detallista hasta el último fleco. El mismo se define como un poco maniático. En las reuniones en Moncloa y en Ferraz escucha y pide opiniones. No soporta el peloteo y prefiere gente crítica a su alrededor que pueda convencerle con argumentos.

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Y aunque sabe improvisar, cuando lo hace suele ser sobre una base preparada. Todas las fuentes consultadas coinciden en que, si bien encarga papeles, él se escribe personalmente todos los discursos. Como el que pronunció ayer.

Él es su jefe de gabinete, su jefe de campaña y su propio jefe de prensa, nos dicen. "Lo tiene todo en la cabeza", sentencian estas fuentes. Y todo seguirá pasando por él, sobre todo ahora que ha anunciado su salida del Gobierno para convertirse en la gran esperanza del PSOE para las próximas elecciones.