La central de Fukushima todavía filtra agua radiactiva
Tres meses más tarde de la catástrofe continúan los problemas en la central nuclear y se detecta radiactividad en habitantes de la zona
La central nuclear de Fukushima, afectada por el terremoto y el posterior tsunami que tuvo lugar en marzo, sigue filtrando agua radiactiva al exterior y la radiactividad de las personas del entorno manifiesta que es una zona inhabitable
Unas 15 toneladas de agua radiactiva se han filtrado al exterior desde la central nuclear Fukushima-1, según informó este martes la Agencia de Seguridad Industrial y Nuclear de Japón.
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El agua tenía bajos niveles de radiación y se filtraron desde un tanque de almacenamiento de la planta, según la agencia. La compañía de Energía Eléctrica de Tokio (TEPCO), la operadora de la planta, investiga las causas de la fuga, que ya ha sido reparada tras descubrirse al mediodía del martes.
Radiactividad en personas
Además, ya se ha detectado radiación en habitantes de la zona. Investigadores del Instituto de Radiación Biológica y Medicina de la Universidad de Hiroshima han localizado radiactividad en un grupo de 15 habitantes de la prefectura de Fukushima.
Los participantes en la investigación, con edades comprendidas entre los 4 y los 77 años, presentaron niveles anormales de cesio radiactivo en las dos pruebas a las que fueron sometidos. Sin embargo, el director del estudio, Nanao Kamada, ha descartado que la concentración detectada represente una amenaza para la salud.
Por otro lado, solo seis participantes tenían yodo radiactivo, entre ellos un anciano de 77 años que en la primera ronda presentaba niveles preocupantes de 3,2 milisievert, aunque en la segunda desaparecieron. "La causa más probable es que comiera verduras y champiñones contaminados antes de las restricciones, no que lo inhalara", ha explicado Kamada.
Zona inhabitable
No obstante, aunque la radiactividad en humanos es reducida, la recibida diariamente durante dos meses por el entorno que rodea a la planta es de entre 4,9 y 13,5 milisievert, por encima de los 20 permitidos legalmente por año, por lo que es inhabitable.
"Desde la perspectiva de proteger la salud humana de la radiación, está claro que desafortunadamente no podrán seguir viviendo en sus casas", ha dicho Kamada, en referencia a los sujetos de su estudio, aunque miles de personas no podrán regresar a sus casas.
Este estudio, recogido por la cadena estadounidense CNN, se llevó a cabo entre residentes de las ciudades de Iitate y Kawamata, a unos 40 kilómetros de la central nuclear, a través de dos test realizados a principios y finales de mayo, cuyos resultados se dieron a conocer a los participantes el 19 de junio.