El Eurogrupo discute el desembolso del próximo tramo de ayuda a Grecia

Los ministros de Finanzas de la zona euro intentan lograr hoy un acuerdo sobre el desembolso del quinto tramo del programa de rescate financiero de Grecia entre diferencias acerca de si podrán lograr un acuerdo al final de la jornada y sobre su volumen

La reunión de este domingo en Luxemburgo, que irá seguida de otra sesión en la mañana del lunes, intenta avanzar también sobre los detalles de un nuevo programa que absorba el actual, aunque este proceso será más lento y no se espera una decisión hasta el 11 de julio. El presidente del Eurogrupo, el luxemburgués Jean-Claude Juncker, ha asegurado que "no habrá ningún acuerdo este domingo" sobre el desembolso del quinto tramo, en lo que coincide con otras fuentes comunitarias.

En cambio, la ministra española, Elena Salgado, y el belga Didier Reynders se han mostrado más optimistas respecto a la posibilidad de cerrar esta noche un compromiso sobre este punto. "Lo que esperamos al menos es desbloquear la siguiente disposición de fondos que necesita Grecia para los próximos meses", afirma Salgado en unas declaraciones al llegar a la sede del Consejo de Ministros en Luxemburgo. Las diferencias de percepción se mantienen también en cuanto a la cantidad que se quiere desbloquear, una decisión que se espera cerrar mañana como muy tarde.

Mientras la Comisión Europea mantiene que el quinto tramo sería de 12.000 millones de euros, Salgado ha indicado que la cantidad podría ser de unos 13.000. En cambio, el ministro belga, Didier Reynders, ha avanzado que la zona euro podría entregar a Grecia únicamente la mitad del próximo tramo del rescate (6.000 millones de euros) para que haga frente a sus necesidades más inmediatas de financiación mientras se resuelven las incógnitas que penden sobre su segundo plan de rescate.

De cara al nuevo programa de rescate, el punto crucial es ver cómo se articula la participación voluntaria de bancos tenedores de bonos griegos, una cuestión que se está tratando. "La cuestión es el alcance que puede y debe tener (esta medida), dado que su contribución podría lleva a una calificación por parte de las agencias que no conviene ni a Grecia ni a la zona euro en su conjunto", señala Juncker. Según Salgado, los ministros están dilucidando ahora "cómo se hace" esta negociación con los acreedores, "si de manera autónoma por parte de cada uno de los bancos" o "si las autoridades de cada país" negocian con las instituciones que tengan bonos griegos.

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