Keiko Fujimori, la candidata de los empresarios
Keiko Sofía Fujimori Higuchi, de 36 años de edad aspira a convertirse en la primera presidenta de Perú de la mano del partido Fuerza 2011.
Keiko ya conoce muy bien la Casa de Pizarro, residencia oficial del mandatario peruano, ya que en 1994 con tan sólo 19 años se convirtió en la Primera Dama del país andino tras el divorcio de sus padres, cargo que ejerció hasta el año 2000 cuando su padre, Alberto Fujimori, renunció a la Presidencia acosado por los escándalos de corrupción.
La sombra de su padre la persigue para bien y para mal, sus detractores le recuerdan sin cesar los errores de su progenitor, acusado de delitos de corrupción y de violar los derechos humanos; mientras que para sus partidarios su apellido es sinónimo de estabilidad económica.
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Muchos la acusan de ser un mero instrumento de su padre y aseguran que quien realmente gobernará será Alberto Fujimori. Keiko siempre se ha defendido de estas acusaciones, "Si soy elegida presidenta del Perú, las decisiones las voy a tomar yo", ha asegurado en la prensa local.
Keiko nació en Lima y es la primogénita del Alberto Fujimori y de la empresaria Susana Higuchi, ambos de ascendencia japonesa. Realiza sus estudios superiores en Estados Unidos, donde se licenció en Administración de Empresas y cursó un máster en Administración y otro en Negocios en la prestigiosa Universidad de Columbia. Allí conoció a su actual esposo, el estadounidense nacionalizado peruano Mark Vitto Villanella.
En el año 2005 abandonó el país norteamericano y regresó a Perú para ayudar a su padre en los comicios presidenciales y legislativos de 2006. Finalmente su padre no pudo participar en las elecciones, sin embargo, Keiko logró ganar un escaño en el Congreso y se convierte en la portavoz de su partido, Alianza Popular.
Durante su estancia en el Congreso intentó que se aprobara la pena de muerte para los violadores de menores y para los ladrones que asesinen a sus víctimas, entre otros proyectos de reducción de beneficios carcelarios.
El 8 de abril de 2009 su padre fue condenado a 25 años de prisión, Keiko siempre ha asegurado que confía en que su padre sea absuelto por los tribunales y ha negado en reiteradas ocasiones que cuando llegue al poder vaya a indultar a su padre.
El 10 de abril de 2011 concurrió a las elecciones presidenciales con un nuevo partido, Fuerza 2011; y se convierte en la segunda candidata más votada, con el 23,6% de las papeletas, por detrás de Ollanta Humala, quien obtuvo el 31,6% de los sufragios.
