Elche y Villarreal B empatan y dejan al Rayo a un punto del ascenso
El Elche y el Villarreal B empataron sin goles y dejaron al Rayo Vallecano a un punto del ascenso a Primera, en un partido en el que los locales pudieron golear, pero en el que siempre tropezaron con el portero visitante, Mariño, que fue el mejor de su equipo.
El equipo ilicitano se mantiene en puestos de promoción y depende de sí mismos para asegurarse la tercera plaza, mientras que el filial del Villarreal, en el que debutó en el banquillo el exguardameta José Francisco Molina, aún no certifica la permanencia
El Elche, que arrancó el partido presionando muy arriba la salida del Villarreal B, aunque éste llevó la manija del partido en los primeros compases, pudo, por medio de Xumetra, romper la igualada inicial a los 20 minutos, pero su remate, con el portero vendido, se fue por encima del travesaño.
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Los ilicitanos se adueñaron del balón en la zona ancha y se reclamó un penalti por derribo de Ángel a los 21 minutos. Kike Mateo, en el 32, remató ajustado a la cepa del poste derecho de la portería de Mariño. Acciari, en el 40, cabeceó un saque de esquina que se encontró en la raya de gol el portero visitante.
El Elche arrancó la segunda parte convencido de que podía sumar los tres puntos para apuntalar su presencia en la promoción de ascenso y en los minutos 53 y 60 Ángel se quedó solo ante Mariño pero sus remates los atajó el portero castellonense cuando, sobre todo el primero de ellos, se colaba. En el 62 la ocasión fue de Xumetra.
El Villarreal B adelantó su defensa para dejar en fuera de juego a los artilleros ilicitanos, lo que provocó que Ángel y Kike Mateo cayeran repetidas veces en la trampa que les tejían los pupilos de Molina.
Los locales tuvieron hasta nueve ocasiones de gol ante un rival que jugaba a la contra, pero el premio al mejor juego ilicitano no llegaba, lo que obligó a Bordalás a realizar un cambio más ofensivo para buscar la victoria, dando entrada a Jesús Perera en lugar de Kike Mateo.
El Villarreal B, en el 84, tras una contra, pudo llevarse los puntos, pero el remate de Castellani lo atajó en dos tiempos Jaime y frustró la esperanza castellonense y, a la distancia, del Rayo, que con esa victoria visitante hubiese festejado ya el ascenso.