La 'presa in giro' (o la tomadura de pelo) de Silvio Berlusconi

El último socio político de Berlusconi y de su ejecutivo, Umberto Bossi de la xenófoba La Liga Norte, ha pedido a Berlusconi que 'smetta di prenderci in giro', literalmente que deje de tomarnos el pelo. Al día siguiente de la cumbre bilateral italo-francesa La Liga acusa a Berlusconi de arrodillarse ante Sarkozy, radicaliza su oposición a las operaciones de bombardeo de Italia en Libia y anuncia que pasará cuentas en el próximo Consejo de Ministros. El jefe de la oposición Bersani ha pedido que el Parlamento italiano verifique si Berlusconi cuenta o no con el apoyo parlamentario suficiente para seguir al frente del ejecutivo tras la huída en los últimos años de sus anteriores socios, los democristianos de Casini y los aliancistas de Fini.

No es el primer enfrentamiento abierto entre Bossi y Berlusconi. Ya en 1994 la Liga Norte precipitó la caída del primer gobierno de Berlusconi cuando le retiró el apoyo parlamentario a los 9 meses de la toma de posesión. Para autojustificarse entonces, la Liga Norte publicó en el diario La Padania informaciones sobre el origen de la fortuna de Berlusconi a partir de los cuantiosos préstamos -imposibles de garantizar- de la Banca Rasini de Palermo, de la que su propio padre era consejero delegado en Milán. 'Dinero sucio de drogas y manchado de sangre' -escribió La Padania- procendente de un banco posteriormente intervenido por infiltración mafiosa. Berlusconi no presentó querella alguna contra La Padania ni contra La Liga. Y Umberto Bossi mantuvo fidelidad absoluta al hombre más rico del país en los siguientes 15 años.