Alberto Asarta, responsable de las fuerzas de la ONU en Líbano: "España cumplirá su compromiso"

Alberto Asarta, 59 años, cumplirá el próximo 28 de enero un año al mando de 12.000 cascos azules (España aporta un contingente de 1.100 soldados) de 35 nacionalidades y mil civiles de 85 países diferentes desplegados en el sur del Líbano. "Una gran torre de Babel", según sus propias palabras, que asume como "un desafío y un privilegio".

Cauto, midiendo sus palabras y apreciaciones sobre los detalles de la misión de la Fuerza Provisional de Naciones Unidas en el Líbano (FINUL) porque la situación en el país árabe es compleja y extremadamente sensible. Asarta ha explicado a la Cadena SER la cotidianidad de un trabajo que aún requerirá la presencia internacional durante mucho tiempo.

El enfrentamiento durante varias horas entre los ejércitos de Israel y Líbano el pasado mes de agosto, en el que murieron tres libaneses y un israelí, ha sido el incidente más grave desde el final de la guerra de 2006.

¿Sorprendió a la FINUL? ¿Cómo gestionaron la tensión?

Totalmente, fue una sorpresa para todo el mundo. Cuando sucedió el incidente yo estaba en una reunión que me llamaron a Nueva York, inmediatamente me llamó el primer ministro Saad Hariri, cambié mis billetes de regreso, los adelanté. Ese mismo día me puse de camino de vuelta. Cuando venía por el camino venía pensando cómo era posible que después de cuatro años con pequeños incidentes que resolvíamos, pudiera haber sucedido este incidente tan grave y tan trágico que podría haber conducido a una nueva guerra. Llegue a la conclusión, a la idea de organizar un tripartito inmediatamente con la dos partes, Israel y Líbano, lo conseguimos, y les propuse la idea de tratar este incidente como algo aislado completamente, como si fuera un cáncer: se quita el tumor, se cierra y se continúa construyendo confianza entre las partes y manteniendo al estabilidad de la zona.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Tanto en las declaraciones de algunos dirigentes libaneses como de ciudadanos del sur existe un reproche hacia la Finul (UNIFIL) por limitarse a tomar nota de las violaciones diarias del espacio aéreo y de parte de la resolución 1701 por parte de Israel. ¿Cree que existe cierta confusión respecto a la misión de la FINUL?

UNIFIL no está aquí para luchar contra nadie. Hay gente, no personas de al calle sino personas también importantes que están equivocadas y piensan que la UNIFIL está para que en el caso de que Israel intente una nueva agresión, luchar codo a codo con el Ejército libanés para repeler esa agresión. Eso no es cierto, en absoluto. Nosotros somos fuerzas de paz y estamos aquí con unas misiones determinadas no para luchar contra nadie.

¿Cómo puede la FINUL contribuir a que se creen las circunstancias para que exista una unidad libanesa duradera?

La mejor manera es, primero: proporcionar estabilidad, cumplir bien con nuestras misiones y segundo, apoyar, todo lo que podamos el papel que las LAF (Fuerzas Armadas Libanesas) tiene encomendado porque yo soy de los que piensa, en Naciones Unidas creemos que las Fuerzas Armadas son la clave para la unidad de este país, porque es la única organización, estructura, capaz de aglutinar todas confesiones, todas las religiones con una sola idea, con una sola misión y bajo un solo mando.

Cuando fue nombrado por el secretario de la ONU, Ban Ki Moon, hubo cierto rechazo por parte de Israel por su nacionalidad. ¿Cree que sigue habiendo reparos a su gestión?

La verdad es que no conozco los entresijos políticos. Puedo decir sólo dos cosas: la primera que cuando terminé y volví a España después de ser jefe de sector lo primero que el Jefe del Estado Mayor de la Defensa, me dijo; Alberto, tú vas a ser el candidato español para mandar la UNIFIL, y ahí me quedé. Y referente a los israelíes, lo que sé es que estaban contentos con el trabajo de Graziano y los cambios siempre generan dudas, pero bueno, yo creo que ahora están contentos, que no hay mayores quejas.

¿Qué apoyo tiene la FINUL entre la población del sur de Líbano?

Un 95% de la población está con UNIFIL, valoran nuestro trabajo aunque como en cualquier familia grande siempre hay pequeños problemas que tratamos de resolver día a día, pero son pequeños problemas que podemos manejarlos. De hecho en las últimas reuniones que he tenido con el Jefe del Ejército, con el presidente, el primer ministro y el portavoz del Parlamento, les he dicho una frase que ha quedado como marketing de UNIFIL y del sur del Líbano, y es la siguiente: Si quieres la paz ven para el sur. La situación es tranquila, es buena y la relación con la población civil es muy buena.

¿Está la UNIFIL tomando algún tipo de medidas adicionales para cuando se haga público el acta de acusación del Tribunal Especial de la ONU sobre el asesinato del ex primer ministro Rafik Hariri?

La UNIFIL no tiene absolutamente nada de que ver con el Tribunal y hemos tratado de desligarnos de este asunto desde el principio. UNIFIL está trabajando aquí bajo un mandato que es la resoluciones de Naciones Unidas 1701, tenemos nuestras misiones específicas y tenemos planes de contingencia para cualquier eventualidad, tanto para nuestros soldados como para el personal civil que trabaja para nosotros y también para la población civil, pero esperemos que todo vaya bien.

Algunos países han disminuido el número de soldados destinados a la FINUL, ¿España tiene intención de mantener a los mismos efectivos o de ampliar el contingente?

Lo que tengo muy claro es que España va a cumplir su compromiso con UNIFIL. Desde que tomé el mando, tanto el Jefe de Estado Mayor de la Defensa como el mando de operaciones como la propia ministra, me han dicho que van a cumplir, y están cumpliendo con el compromiso que tienen con UNIFIL. Mientras que algunos países han disminuido el número de tropas sin disminuir las capacidades, España ha mantenido el número, con lo cual, en valores relativos hemos aumentado el tanto por ciento de participación dentro de UNIFIL.