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La Inspección de Trabajo, contra la economía irregular

En 2009 aumentaron las sanciones por fraude a la Seguridad Social, aunque cayeron las multas por irregularidades en materia de seguridad y salud

Los datos de actuación de la Inspección de Trabajo correspondientes a 2009 muestran cómo aumentan las sanciones por fraude a la Seguridad Social (trabajadores no dados de alta, o parados que en realidad están trabajando). En cambio, caen las multas por irregularidades en materia de seguridad y salud, lo que refleja el descenso de actividad en la construcción y la industria y el menor número de accidentes de trabajo registrados.

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Esos mismos datos muestran cómo la fuerte incidencia de la crisis en ese año condujo a la imposición de sanciones más severas en el combate del fraude en Seguridad Social y de la economía sumergida; prácticas como no dar de alta a trabajadores, o detectar a perceptores de prestaciones del paro que en realidad están trabajando aumentaron durante 2009.

Según los datos del Ministerio de Trabajo, en materia de Seguridad Social se realizaron 32.099 actuaciones más que en 2008, y se registraron 9.921 infracciones en acta más; como consecuencia de ello, las sanciones impuestas sumaron cerca de 69 millones de euros, casi 16 millones más que en 2008.

Por otro lado, la mejora en la coordinación con otras administraciones que también combaten el fraude, como la Agencia Tributaria, ha permitido también mejorar (según las fuentes consultadas) la efectividad de la Inspección de Trabajo en este terreno.

Sin embargo, la crisis también se ha traducido en menos infracciones y menos sanciones en otros ámbitos. Es el caso de la Seguridad y la Salud Laboral, en el que han aumentado las actuaciones (2.314 más que en 2008), pero las infracciones y el importe de las sanciones han caído.

En este último caso, son 38 millones de euros menos en 2009 que en 2008; una disminución que obedece a la caída en la actividad de la industria y de la construcción y también al fuerte retroceso de la siniestralidad laboral de 2009 respecto a 2008.

Con todo, en términos globales, en 2009 la Inspección de Trabajo realizó 64.536 actuaciones más que en 2008 y recogió 1.936 infracciones en acta más; pero el importe de las sanciones fue de cerca de 58 millones de euros menos.

Los sindicatos señalan que hay que tener en cuenta un factor importante: en los periodos de crisis, los trabajadores denuncian menos las irregularidades por temor a perder su puesto de trabajo. Son precisamente las inspecciones por denuncias las que suelen acarrear sanciones más importantes, frente a las actuaciones preplanificadas por la Inspección, donde las irregularidades detectadas suelen ser menos graves.

 
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